Galería: Agentes de la Guardia Civil de Castilla y León se enfrentan a un simulacro de riesgo biológico

El campo de fútbol del Polideportivo San Andrés en Soria ha sido testigo esta mañana de un simulacro de riesgo biológico en el que han participado efectivos de distintas Comandancias de la Guardia Civil de Castilla y León. Los agentes se han enfrentado a un simulado aviso de un hombre que presentaba síntomas de ántrax, en una explotación ganadera en la que se habían detectado ya varios casos de dicha enfermedad y debían proceder a evacuar al enfermo para que pudiera recibir asistencia sanitaria, además de asegurar el perímetro para impedir que haya nuevos contagios.

Este era, según ha señalado el subdelegado del Gobierno en Soria, Miguel Latorre, “el último ejercicio que se va a realizar después de una semana de aprendizaje teórico-práctico” sobre el sistema de respuesta NRBQ (riesgo nuclear, radiológico, biológico y químico) de Nivel 1 para una treintena de efectivos de Soria, Burgos, León, Segovia, Valladolid y Zamora. El objetivo de estas jornadas es formar a aquellos que integrarán la unidad de primera intervención de estas Comandancias, que pueda mantener la operatividad del Sistema NRBQ de la Guardia Civil en su nivel básico. Su labor consiste en asegurar la zona de máximo riesgo y evacuar a posibles afectados hasta la llegada de unidades especializadas, prestando además los apoyos necesarios.

El Comandante Caro, de la Unidad Central Operativa de la Unidad de Desactivación de explosivos y defensa NRBQ de la Guardia Civil, con sede en Valdemoro, quien ha sido uno de los hombres al frente de estas jornadas formativas, ha recordado el “cercano” referente de la pandemia, y cómo nos “ha pillado a todos con el pie cambiado”. Por eso, cree que es importante “implementar una serie de conocimientos al personal y tener una unidad formada”: “hay gente que se pregunta si algún día ocurrirá algún incidente de este tipo; nosotros nos preguntamos cuándo y dónde sucederá”.

El sistema de defensa NRBQ cuenta con 3.000 hombres distribuidos por todo el territorio nacional. En Castilla y León, se han llevado a cabo dos intervenciones en los últimos tres meses. Caro considera que la población le da más importancia a este tipo de protocolos a raíz de la pandemia, aunque recuerda que “la Guardia Civil lleva desde el 98 formando personal” y que no solo se orienta a asuntos de delincuencia y terrorismo, sino a accidentes de distintos tipos y vertidos de residuos tóxicos industriales.