El Santa Bárbara da la bienvenida a 19 residentes y despide a 18 que han finalizado su formación

Adrián Flores y Elena Arjol son dos residentes que hoy han terminado su formación en el Hospital Santa Bárbara. Lo hacen con mucha emoción y agradecidos de haber podido formarse en Soria.

Flores realizó sus prácticas en Atención Primaria en la especialidad de Familia. Su elección se basó en un vínculo familiar. Su tío se dedica a esta rama de la medicina y desde que era pequeño le había llamado la atención. Es de Logroño, pero eligió Soria para realizar su residencia debido a que así se encontraba cerca de su familia. Ahora que ha finalizado su formación tiene previsto quedarse en la provincia unos cuantos años más desempeñando su profesión, ya que estos últimos cuatro años “han sido muy buenos y ha cumplido con mis expectativas”.

Por su parte, Arjol también tiene previsto quedarse en Soria. Igual que Adrián ha hecho Medicina Familiar y Comunitaria debido a que “me gusta tratar con los pacientes de forma personal, no solo su enfermedad, sino también su entono porque influye mucho en el diagnóstico”. En su caso escogió la provincia porque tiene vínculo familiar e igualmente tiene previsto quedarse en la provincia.

Ambos afirman que hay falta de especialistas, pero que esta situación se podría paliar si se les ofreciesen mejores condiciones laborales y de formación, pues “no se trata solo de las condiciones económicas”.

Y entre los 18 residentes que se despiden, también están las nuevas caras que entran a formarse. Es el caso de Marta Sanz. Viene de Madrid y escogió el Santa Bárbara porque se trata de un hospital pequeño y “para hacer la residencia en Familia el trato es más cercano, y al no haber residentes de otras especialidades nos dejan hacer más a nosotros, por lo que la formación será más completa”. Todavía tiene cuatro años por delante, pero afirma que quedarse es una de las opciones que ya se está planteando.

Junto a ella, otras 18 personas entran en esta nueva promoción de residentes, de los cuales 10 son graduados en Medicina y Cirugía y nueve en Enfermería. Se dividirán de la siguiente forma: nueve son médicos internos residentes (MIR) que se repartirán en cinco en Medicina Familiar y Comunitaria, uno en Medicina Interna, uno en Medicina Intensiva, uno en Radiodiagnóstico y uno en Psiquiatría. A ellos hay que sumar un psicólogo interino residente (PIR) y los nueve enfermeros interinos residentes (EIR), de los que ocho han elegido Enfermería Familiar y Comunitaria y uno Enfermería de Salud Mental. La delegada territorial, Yolanda de Gregorio, ha querido recalcar que este formación “comenzó en el año 2018 con 31 residentes, número que ha aumentado, y gracias a estas nuevas incorporaciones, a finales de año se estarán formando en Soria 82 residentes”.