La carta de Sergio García, director de Soria Noticias
Analizar unas elecciones como las municipales, con un sinfín de matices, detalles y condicionantes no es nada sencillo. Y cuanto más pequeño es el municipio, y en Soria todos lo son, más complicado resulta. Pese a ello, hay algunos detalles que no se pueden dejar de comentar. Resultados que los partidos harían mal en pasar por alto, pues reflejan la opinión de los ciudadanos, la percepción soberana sobre la gestión, las formas, el proyecto y la manera de hacer política de cada uno.
En la capital, el poderío de Mínguez parece indiscutible. Aunque baja de porcentaje de voto por primera vez en la historia, su 48,5% y 12 concejales son un triunfo incontestable y un aval a su forma de entender Soria y la política. El PP crece y aunque su candidata presume de recortarle “2.000 votos a Mínguez” (en realidad son 1.757) y de “romper la tendencia”, el resultado bien podría considerarse insuficiente. 18 puntos de diferencia son muchos para ser considerados una alternativa. Venir de los peores resultados en 40 años ayuda, como también deberían haber ayudado los 1.868 votos que ya no fueron a parar a Ciudadanos y la PPSO. El PP solo logró pescar la mitad de ellos. En esos 7 concejales hay trabajo y capacidad suficientes para hacer un proyecto serio para Soria… ¿Se lo permitirá el cainismo del PP soriano?
Los resultados de los partidos minoritarios no dejan de sorprenderme por el increíble peso que tiene la política nacional en una ciudad tan pequeña. Vox logra por fin entrar en las instituciones, y pondrá sobre la mesa temas incómodos y no siempre agradables. Me sorprende, también, que Podemos, tras los 4 años de Marisa Muñoz y toda la movilización del Cerro de los Moros, no haya llegado al 5%. La Izquierda (Unida) de Soria debe convencerse de que solo agrupando el voto tendrá capacidad de control y decisión en el Ayuntamiento.
En los pueblos, el PP haría bien en no pasar por alto sus resultados en Almazán y El Burgo. En Almazán, la derecha ha perdido 1 de cada 5 votos, y en El Burgo 1 de cada 4. Siendo las dos localidades las figuras totémicas de la PPSO (ruptura, disputa e integración) tal vez los ciudadanos estén queriendo mandar un mensaje al partido.
En Ólvega, Elia crece al garantizarse la mayoría absoluta. En Ágreda, el PSOE nota cierto desgaste: ¿la marca o el candidato? El 8-3 con 6,5 puntos y un centenar de votos más de Serrano en Golmayo y el resto de resultados provinciales deberían servir para disipar cualquier duda sobre su poder interno en el PP. Unos populares que han recuperado San Esteban, atacando las carencias en la gestión del PSOE, San Leonardo, demostrando que cuando las cosas se hacen bien 2 y 2 sí suman 4, Duruelo, donde los vecinos no perdonan, y Berlanga, gracias al tirón del candidato.
Ahora que toca elegir candidatos para las generales, los partidos deberían tener muy en cuenta los mensajes que los vecinos de Soria han lanzado en las urnas.