Mientras que Mª Rosa no tiene ninguna fecha señalada en rojo en el calendario, Juan Carlos no para de pensar en cómo vivirá el Miércoles ‘El Pregón’ desde las escalinatas del Ayuntamiento.
Juan Carlos Benito siempre había querido ser jurado de las fiestas. Tras ejercer como cuatro en varias ediciones, este año por fin ha podido ocupar uno de los cargos que le faltaban al convencer a su mujer, Mª Rosa Garitonandia, para que le acompañase en esta aventura. “A mí me tiraba para atrás todo el tema de hablar con la prensa”, manifiesta la jurada, al tiempo que su cónyuge, con una sonrisa de oreja a oreja, indica que “al final se ha apuntado y ahora lo único que queremos es que todo salga bien y que los vecinos nos perdonen si cometemos algún error”.
Con esos ánimos, estos ya han dado un lavado de cara al local, pintando unos burladeros y decorando un techo en el que aparecen el sol, el vino y los toros. Asimismo, también han querido mantener un elemento que lleva acompañando a La Cruz y San Pedro en los últimos años como los Arcos de San Juan de Duero, buque insignia de la Cuadrilla. De la misma manera, se pueden apreciar botas que ilustran a su santo, a la puerta de la Dehesa, a Valonsadero o a los piñorros en una pared al fondo a la izquierda.
Hablando de ellas, estos alcaldes de barrio no se imaginan por cuánto pueden pujar los sanjuaneros el Sábado ‘Agés’, aunque indican que el año pasado se llegaron a pagar en La Cruz y San Pedro 350 euros por una. Con todos esos detalles preparados, ambos también presumen de una charanga ‘Aires de Huerva’, procedente de Zaragoza, que tiene experiencia en estos festejos -el año pasado tocaron en San Miguel-.
Después de esos pasos, que catalogan como “muy intensos y emocionantes”, esta pareja se encuentra inmersa en recorrer las casas de una zona en la que predominan los vecinos de mediana edad: “No nos podemos quejar, aunque existen personan que entran en fiestas, pero luego vienen a borrarse porque quieren seguir en sus anteriores cuadrillas”.
A ese respecto, los jurados analizan una reorganización que “a nosotros en general nos ha perjudicado porque muchos individuos optan por seguir en las que les pillan más cerca”. De esa forma, estos muestran su opinión, recalcando que “cada uno debería apuntarse en la que le toca; esta medida no va a ser solo para este año y nos tenemos que acostumbrar”. A su vez, consideran que “deberíamos intentar entre todos poner un precio único” que podría rondar los 30 euros.
Con todo ello, las adversidades no les han quitado la ilusión por celebrar San Juan 2023 por todo lo alto y con el reto de alcanzar la cifra de 860 vecinos. Mientras que Mª Rosa no tiene ninguna fecha señalada en rojo en el calendario, “ya que cada uno tiene sus cositas”, Juan Carlos no para de pensar en cómo será estar en las escalinatas del Consistorio el Miércoles ‘El Pregón’ o en la manera que se desarrollará el Viernes ‘de Toros’: “He estado toda mi vida como peñista gritando en la Plaza Mayor. Este año no me lo puedo imaginar”.
Por último, antes de despedirse, los máximos representantes de la Cruz y San Pedro lanzan un mensaje a los sorianos, haciendo hincapié en la importancia de que colaboren, “porque con su aportación nos ayudan muchísimo a la hora de sacar estas fiestas adelante”.