Carolina Muñoz y Carlos Rubio presentan un nuevo capítulo centrado en el suroeste provincial.
La 'Historia en Bicicleta', que protagononizan Carolina Muñoz y Carlos Rubio, ha lanzado un nuevo capítulo documental por tierras de Soria, recorriendo algunos de los pueblos más olvidados y sorprendentes de su provincia. La entrega lleva el título 'Romanos, guerreros y obispos'
Los cicloturistas han elegido Retortillo de Soria para iniciar su nueva ruta, lugar donde los romanos construyeron una calzada que unía las localidades de Tiermes y Medinaceli atravesando el páramo, y por donde todavía se puede apreciar su capa de rodadura a pesar del tiempo transcurrido y de haber servido para el tránsito de vehículos agrícolas.
En Retortillo muestran sus calles que siguen conservando parte de su sabor medieval en un agradable paseo desde la Puerta Sollera, por donde entran, para salir por la Puerta Sur atravesando toda la localidad en dirección al páramo.
Después de una pequeña subida, para sumergirse en unos parajes sumamente evocadores, porque además de la calzada, recuerdan que por donde transcurre la actual carretera fue un camino medieval que se dirigía hacia la actual localidad de Miedes de Atienza y el valle del Tajo. Y aún resulta más sugerente es la referencia al Cid Campeador que recorrió junto a sus tropas estos lugares para cruzar la frontera y exiliarse dirigiéndose a la localidad de Castejón de Henares, relato recogido en el Cantar de Mío Cid.
Muñoz y Rubio continúan su recorrido hasta Torrevicente, un pequeño pueblo que se encuentra en cuesta y por donde pasa el río Talegones. A pocos metros enseñan los restos de la torre islámica que tiene el mismo nombre que esta localidad y que, junto a otras edificaciones de este tipo, formaban una tupida red de vigilancia para evitar que se produjeran incursiones, cuyas posiciones estaban cuidadosamente estudiadas.
En este punto es donde se sucedió una batalla en 981, en la que se enfrentaron por una parte Abu Amir, el gran chambelán del Califato de Córdoba, contra una coalición formada por su suegro, el general moro Galib, el conde de Castilla, García Fernández y el rey de Viguera, Ramiro Garcés. El resultado de este episodio bélico fue una victoria sin paliativos del primero de los contendientes, tomando desde entonces el apelativo de 'Al Mansur' (el victorioso), conocido en adelante por los cristianos como Almanzor.
Y ya, con un suave pedaleo, el periplo llega a Brías, pasando por Alaló. Lo que realmente sorprende en el primero de ellos son sus dos singulares y monumentales edificios que son la iglesia de San Juan Bautista, de finales del siglo XVII, en la que destaca su imponente torre de notable sillería, y la casa-palacio de un inequívoco aire renacentista. Ambos edificios fueron construidos bajo la orden de Juan Aparicio y Navarro, vecino del pueblo y obispo de León.
La excursión termina en Abanco, otra pequeña localidad muy próxima a Brías y donde también se encuentran dos magníficos edificios que llaman poderosamente la atención, que son su iglesia, consagrada a San Pedro, y enfrente otra impresionante casa solariega, muy parecida a la de Brías. Estas dos construcciones corrieron por cuenta de dos sobrinos del mitrado Aparicio, quienes fueron José y Miguel Martínez, naturales de Abanco.
Es en esta plaza de la localiadd donde concluye este instructivo recorrido acerca a lugares poco conocidos y cargados de relatos emocionantes.
El video: