El festival tendrá lugar entre el 27 y el 29 de julio en Soria capital, aunque el 25 comenzará el curso de iniciación al blues. Entre los cabezas de cartel se encuentran The Fuzillis, Cimafunk, Steffen Morrison o Lehmanns Brothers.
El Enclave del Agua se ha convertido, año a año, en uno de los momentos más esperados del verano en la capital soriana. A menos de una semana de que de comienzo su XVI edición, ya se ultiman todos los detalles para que todo salga perfecto en este "festival abierto, participativo y familiar en el que música y naturaleza van de la mano, con una gran variedad de grupos de música afroamericana, tanto nacionales como internacionales". Y es que así define Víctor Frutos, su director artístico, la esencia de este evento que ya se ha convertido en el "referente en España" de este estilo musical.
Como no podía ser de otra manera, el paraje del Soto Playa volverá a acoger los dos escenarios de este festival: el Principal y el de La Pradera. Estos acogerán un imponente cartel que abarca todo tipo de estilos y géneros, desde R&B, rock and roul o soul hasta el reggae o el latin funk y sin perder de vista el soul, "el gran árbol de los estilos de la música negra, aunque intentamos que todos tengan un espacio en este festival". Y aunque "la forma del Enclave del Agua está muy definida", en esta edición "hemos incorporado nuevos ingredientes que le van a dar un sabor muy especial a esta edición", en palabras de Frutos. Todo, con "un buen equilibro entre bandas españolas e internacionales".
Entre la treintena de grupos que tomarán parte en este evento, destacan nombres como el de 'Cimafunk', nominado este año a los Latin Grammies. Una "programación impresionante en el escenario principal" que completan artistas de primer orden como Lehmanns Brothers o The Fuzillis.
De llevar un pedacito del Enclave a distintos puntos del centro como La Dehesa o el Tubo Ancho se encargará el Enclave Vermú. "Fue una forma de que el espíritu del festival empapara la ciudad y ya tenemos una cultura del vermú", asegura el director artístico. Estos conciertos tienen como objetivo "dar a conocer todo el talento que hay en España, pero sobre todo el que hay en Soria". Además, en el Enclave Vermú también tomarán parte bandas jóvenes y emergentes que buscan dar a conocer sus nuevos trabajos. "Es una programación un poco más abierta que la que encontramos en el río, puede no ceñirse a la música afroamericana", añade.
Pero aunque el festival, propiamente dicho, comience el viernes 27, el espíritu del blues comenzará a invadir Soria dos días antes. Y es que el Curso de Blues tiene como objetivo despertar el interés de los sorianos por este estilo musical y aprender nociones básicas. Un género que moldea y está presente en la música mainstream más escuchada todavía en la actualidad en artistas de todo tipo, desde Bruno Mars, Adele o Nicki Minaj, que emplean su característica escala pentatónica. Aurora García y Adrián Costa serán los encargados de impartir estas lecciones, que culminarán en un concierto "para que todos los alumnos y profesores puedan expresar sobre el escenario todo lo que han visto en el curso". "Nos llena de orgullo ver que el enclave adquiere un carácter didáctico", explica.
Para esta nueva edición esperan batir récords y, además, volver a recibir un gran número de visitantes extranjeros, especialmente procedentes de Francia e Inglaterra. Y aunque todas las plazas de camping ofertadas online se han agotado, el festival reserva todavía unas pocas para sacarlas a la venta en la propia recepción de la zona de acampada.
Al tratarse de un festival abierto para el que no se necesita entrada, todos los que se acerquen podrán acceder, además de a los escenarios y la zona infantil aledaña al escenario de La Pradera, al área gastronómica y de food trucks del festival, "con comida y bebida para poder estar en familia disfrutando de la música". Además, los enclaveros también podrán disfrutar, desde el embarcadero, de actividades al aire libre y deportes de naturaleza como el kayak.
Para Frutos, la clave del éxito del Enclave está muy clara: "la calidad por encima de todo, a la hora de producir, a la hora de programar y organizarlo como lo hace el Ayuntamiento de Soria". "Es la premisa que nos marcamos desde el primer año y nos mantenemos firmes en nuestras convicciones", señala. Porque este festival no solo va de música, sino también de "naturaleza en un entorno ideal" sin perder de vista, nunca, su identidad propia.
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