SOS del sector vacuno soriano: "Realmente estamos en riesgo de desaparecer"

Los ganaderos sorianos de vacuno lanzan una urgente y desesperada petición de ayuda a la administración autonómica. “¿Qué tenemos que hacer para que nos reconozcan legalmente los pastos de nuestros montes, donde comen nuestras vacas, para que nos hagan caso?”, se preguntan los ganaderos Antonio Medrano y Félix Soria, de Vinuesa y Abejar, que se alzan como portavoces espontáneos del resto de ganaderos vacunos de la provincia.

La gravísima sequía de este invierno, no solucionada con las lluvias de primavera, que ha colocado a las explotaciones vacunas sorianas en una situación “tremendamente dramática y crítica de supervivencia”, ha avivado la reclamación y la inquietud de los ganaderos, como quedó constatado en la junta preparatoria comarcal de Pinares-El Valle de COPISO, y en la propia asamblea general del pasado día 2 de junio.

Los ganaderos no entienden el retraso de ese reconocimiento, porque la normativa de la Unión Europea reconoce excepciones, “y nuestras comarcas de Pinares y El Valle son una clara excepción, por su modelo tradicional y secular de ganadería extensiva”, insisten. Un sistema de manejo que, por otra parte, resulta vital para la sostenibilidad, conservación y limpieza de los montes sorianos, “que es una referencia nacional e internacional. Por lo que aún entendemos menos que no reconozcan unas hectáreas de pastos que ya usamos. Aprovechamientos por los que, además, pagamos a los ayuntamientos”.

“Es una contradicción, pero ahora mismo los ganaderos tenemos más problemas y trabas con Agricultura que con los técnicos de Medio Ambiente, que son muy conscientes de la trascendencia e importancia que tiene la presencia del ganado en los montes”, subrayan los ganaderos Medrano y Soria.

“Sólo pedimos que se reconozca y se constate una realidad, que se refleje en los expedientes de aprovechamientos de pastos el equivalente a la carga ganadera que puede existir, lo que nos abre las puertas para acceder a más ayudas económicas, lo que supone un alivio más, otra medida que suma y ayuda a la supervivencia del sector ganadero extensivo soriano y, por tanto, al mantenimiento de nuestros pueblos. Porque casi el cien por cien de los ganaderos viven en el entorno donde tienen sus animales”, insisten.

Antonio Medrano y Félix Soria están convencidos y “seguros” de que la tramitación y reconocimiento de esos pastos “es una cuestión sencilla de resolver, con la buena voluntad y apoyo de la Junta y de la Delegación Territorial de Soria, porque la normativa lo permite. Y hay que hacerlo ahora, de manera inmediata, antes de que sea demasiado tarde para muchos ganaderos. No tenemos que perder ni un minuto”.

Han señalado que, a través de COPISO, han trasladado esta problemática de los pastos a los máximos responsables políticos del sector, como son el consejero de Agricultura de la Junta y el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación. “Pero además de que las administraciones nos den la razón como a los tontos, tienen que tomar decisiones, gestionar y resolver el problema”, insiste Félix Soria.

Otra cuestión que preocupa a los ganaderos es la obligación que ha impuesto Europa con los eco esquemas, que obliga a que los animales pasten cada tres meses en diferentes parcelas en las que ubicar el ganado (código de explotación agraria-CEA). Una condición que es un “sinsentido y una sinrazón” en el caso de los montes comunales, que son espacios abiertos sin vallar, por los que el ganado se mueve con libertad todo el año. “¿Vamos a tener que vallar el monte?”, se pregunta Antonio Medrano, “¿inventarnos o detallar unas parcelas artificiales e imposibles para mover el ganado?”

La situación del sector vacuno de Soria es “alarmante. Realmente está en peligro de desaparición”, remarcan. “Especialmente grave es la situación de los ganaderos jóvenes, que se han metido en la actividad, animados por las llamadas de sirena de la administración, para llevar a cabo un relevo generacional”, advierten. “Pero se han metido en unos líos que…, por la falta real de apoyos y facilidades, lamentablemente, alguno ya ha tenido que abandonar”, añaden.

PONER EN VALOR

Los ganaderos sorianos de vacuno creen que “hay que ir más allá. Hay que empezar a poner en valor la ganadería extensiva de la provincia, y su papel en la protección medioambiental del monte y los pinares sorianos, reconocido por todos”.

Al aprovechamiento ganadero de esta zona boscosa, utilizando los términos que emplea la administración europea, hay que darle un marchamo de calidad por las características de su producción, insisten. “Un aprovechamiento sostenible que no nos hemos inventado ahora, es un sistema propio y tradicional que está de siempre. Simplemente, hemos sabido complementarlo y compatibilizarlo con otros usos, como el forestal, que siempre ha ido de la mano del ganadero, y más recientemente de otros como el micológico o el turístico”, apunta Medrano

“Las administraciones, empezando por las más próximas, como los ayuntamientos, y siguiendo por la Junta de Castilla y León y el Ministerio, deben proteger, apoyar y mantener este modelo de explotaciones, que sujeta buena parte de la estructura económica y poblacional de la provincia”, recalcan los ganaderos, que piden “una seria reflexión y mucha creatividad para buscar y encontrar soluciones. Estamos cansados de que nos criminalicen y fiscalicen. Nos han quitado la ilusión por trabajar”.