El campeón del mundo de frontón te enseña a ser el mejor de tu pueblo

Este fin de semana se celebró en Garray un torneo de frontón que contó con unos participantes de categoría. Víctor Molina y Álvaro Moreno, campeones del mundo con España, de Europa y campeones de España, participaron en la competición garreña haciendo vibrar a todos los asistentes. Aunque la dupla tuvo que conformarse con la segunda posición después de superar "un cuadro muy duro", en el que jugaron contra "parejas muy acostumbradas a jugar con esta pelota que nos hicieron sufrir hasta el final". Porque "la bola lenta tiene de bonito que cada frontón es diferente" y permite un juego distinto, tal y como ha podido comprobar este fin de semana en Soria. Aun así, volverán.

Así cuenta Víctor Molina a Soria Noticias su paso por la provincia, una zona en la que considera que el frontón vuelve a valorarse cada vez más: "Muchos torneos están volviendo a subir los premios económicos". Además, cree que mientras que la modalidad de bola lenta "está creciendo en nivel", la olímpica, en la que ellos suelen competir, "está muy estancada, faltan muchos torneos y muchas escuelas".

Este deportista de 27 años lleva desde los 4 con una raqueta en la mano. Para mejorar al frontón, recomienda a otros "divertirse cuando jueguen" y "fijarse en los referentes que tienen en cada zona, que va a poder verlos todas las semanas, para intentar preguntarles, aprender y hacer las cosas de la mejor manera posible".

Siendo consciente de que, para muchas personas, se trata de un deporte practicado de forma ocasional durante los meses de verano, en los pueblos, cree que aunque una buena téncnica "puede ayudarte a adaptarte un poco mejor a distintas situaciones", no es determinante para poder disfrutar del deporte. "Con una técnica más personal se puede jugar y competir al máximo nivel", asegura. Sin embargo, recuerda: "Todos los deportes, cuando se practican demasiado, pueden acarrear lesiones".

Él empezó a competir porque le gustaba y "lo demás, fue llegando solo". Por eso, cree que aquellos que quieran dar el salto a la competición tienen que empezar por entrenar y conocer gente, porque "lo mejor que te queda son las experiencias de todos los torneos, las vivencias que tienes con las demás personas, competir es una parte más". "Mi consejo es que se pongan objetivos, alcanzables, que disfruten jugando y que, al final, todo va a llegar poco a poco", añade.