José Antonio Aparicio, 47 años de servicio público en la Diputación como mecánico y conductor

La Diputación de Soria, antes de arrancar el pleno extraordinario de los presupuestos de 2024, ha llevado a cabo un homenaje a todos los trabajadores de la institución pública que se han jubilado este año. A pesar de que el acto estaba destinado a siete personas, tan solo ha podido acudir uno.

Ese homenajeado ha sido José Antonio Aparicio De Juan, vecino de Espejón que comenzó a trabajar en esta administración en 1976, acumulando 47 años de servicio público en diferentes departamentos. El 1 de diciembre de aquel año comenzó su andadura como mecánico de la Diputación en el aparcamiento situado detrás del palacio.

Tras sufrir una lesión, este tuvo que cambiar de trabajo, pasando a conducir el bibliobús. “Era muy agradecido estar en este servicio, ya que los vecinos de los pueblos se alegraban mucho cuando íbamos. Antes cuando no había Netflix y demás plataformas, entregábamos muchos CDS. De la misma forma, a los más mayores les encantaban los libros, se podían leer 5 en 15 días”.

Recepción

Con estas anécdotas siempre en su recuerdo, cabe destacar que tiene muy buena memoria, ya que se acuerda perfectamente de todo lo que hizo el día que empezó con el presidente Santiago Aparicio, José Antonio, que nunca ha llegado tarde a su puesto, se ha acercado hasta la mesa de presidencia para recibir un obsequio.

Allí le esperaban el presidente, Benito Serrano, la vicepresidenta primera, María José Jiménez, y el vicepresidente segundo, José Antonio De Miguel. Entre los aplausos del resto de diputados, este ha recibido de manos de la máxima autoridad provincial una caja con unas copas de vino con el escudo de la Diputación.

Con ese reconocimiento y con unos recuerdos que permanecerán siempre en su mente, Aparicio se ha despedido definitivamente de una Diputación de la que ya comenzó a separarse hace tres años cuando se prejubiló.