Los trabajadores del Ayuntamiento denuncian externalizaciones y falta de voluntad política en materia de personal

Los representantes sindicales de los trabajadores laborales del Ayuntamiento de Soria han cargado hoy duramente contra la política en materia de personal del equipo de gobierno socialista. Denuncian incumplimientos legales (como la ley de estabilización o la obligatoriedad de contar un plan de igualdad) y falta de voluntad política para renovar la Relación de Puestos de Trabajo (un documento que se debería actualizar cada año, cosa que se hace desde 2015).

Exponen que el Ayuntamiento está sustituyendo trabajadores municipales por empresas y convenios privados. Empresas que “son siempre las mismas” y mediante las que no se cumple el mandato constitucional de igualdad, mérito y capacidad en el acceso al empleo público, señalan.

Así lo han expresado en una contundente rueda de prensa los representantes de los sindicatos CCOO, UGT, USO y CSIF, esto es, todos los integrantes del comité de empresa. Según han explicado, los trabajadores municipales han pasado en los últimos años de más de 400 a unos 320. De ellos, menos de la mitad son funcionarios y, de ellos, la inmensa mayoría son bomberos y policías municipales por lo que el número de funcionarios que realizan tareas administrativas para la casa es realmente ínfimo.

Por todo ello, los cuatro sindicatos que forman el comité de empresa han anunciado el comienzo de un periodo de movilizaciones. Señalan que ellos tienen “abiertas las puertas del diálogo” con el equipo de gobierno, pero lamentan que “no entra nadie desde hace tiempo”. Aunque no han concretado acciones porque se irán “anunciando sobre la marcha” esperan que estas sirvan para “solucionar o al menos visibilizar el enorme laberinto laboral, la ausencia de diálogo y la falta de soluciones”.

Falta de personal

Esa reducción del número de empleados públicos se debe a las jubilaciones que no se cubren y a una RPT desfasada que afecta a todos los departamentos. Los representantes del comité de empresa enumeran algunos de ellos como urbanismo, las instalaciones deportivas, el cementerio o la Audiencia. “Esas instalaciones funcionan y esos servicios se prestan siempre que no preguntes a los trabajadores”, ironizan.

Consideran que la falta de personal y la desorganización municipal, “afecta a todas las secciones y departamentos” y ponen como ejemplo medioambiente, donde actualmente solo hay una persona y está de baja. Las instalaciones deportivas que tienen que cerrarse por falta de personal o la prestación del servicio del cementerio en condiciones poco decorosas para el momento son otros de los ejemplos expuestos.

Ausencia de RPT

Los representantes de CCOO, UGT, USO y CSIF consideran que el principal problema tiene que ver con la no actualización de la Relación de Puestos de Trabajo. Esta ausencia incide en la falta de personal y la no estabilización y se solventa con la contratación de empresas externas. El comité de empresa considera que la RT está “anticuadísima” y consideran imprescindible actualizarla para saber “qué trabajadores tiene y cuales necesita el Ayuntamiento”.

Recuerdan los sindicatos que, por convenio y por ley, al Relación de Puestos de Trabajo debería actualizarse cada año con los nuevos presupuestos. Una obligación que “cumplen otras administraciones” y que el Ayuntamiento de Soria lleva sin acometer desde 2015.

Externalizaciones

Sin RPT y cada vez con más instalaciones y prestaciones municipales, el Ayuntamiento recurre a los convenios y los contratos para paliar la escasez de trabajadores. Los sindicatos lamentan que con esas necesidades “la oferta de empleo público sea raquítica”. Así se produce lo que han calificado como una paulatina “sustitución de trabajadores municipales por empresas privadas”.

Una práctica que consideran “evidentemente ilegal” y que, en algunos casos, hace multiplicar por 3 el coste de los servicios, aseguran. Además, “afecta al principio de igualdad del empleo público” señalan e inciden en que todos los trabajadores del Ayuntamiento deberían pasar por un proceso selectivo porque “la celeridad no tiene cabida cuando la falta de persona es previsible y llevamos mucho tiempo soportándola”.

Considera el comité de empresa que se están prestando servicios por “personal que no es apto” y denuncian además “acuerdos con unas determinadas y solo con esas”. Una práctica “arbitraria” para decidir a quien se contrata que, denuncian, “un Ayuntamiento no debería hacer con dinero público”.

Falta de voluntad política

Los representantes de los trabajadores laborales consideran que se ha llegado a esta situación por la “falta de voluntad política” del equipo de gobierno. Años y años de “más de lo mismo” que han supuesto un “paulatino deterioro de la relación entre el Ayuntamiento y sus trabajadores”, explican.

Consideran que se produce un “diálogo estéril” y de cara a la galería con “continuas idas y venidas, reuniones fallidas y ofertas ridículas” dentro de un proceso “enmarañado en plazos y burocracias” que otras administraciones públicas, incluidas otras de la provincia, realizan con normalidad.

Habla el comité de empresa de “pequeñas intenciones para grandes problemas” sin buscar “solucionar el problema de manera legal” y provocando “la perdida de los cauces normales y lógicos de contratación” y de negociación con los trabajadores. “Es obvio que no existe voluntad política”, reinciden resignadas para solucionar un problema que afecta “a personal, que debería ser una de las áreas más importantes del ayuntamiento”.

Obligaciones que no se cumplen

Entre las denuncias materializadas hoy por los representantes de los trabajadores también se encuentra la falta de un plan de igualdad que “se lleva años esperando” y que “es obligado por ley tener desde 2007. Consideran contradictorio que un equipo de gobierno que se considera progresista eluda este tema y piensan que es porque “deberían dar unos datos de trabajadores y sueldos” que dejarían en muy mal lugar a la casa. Los sindicatos calculan que el 92% de las trabajadoras municipales tiene un contrato temporal.

También denuncian que el Ayuntamiento no entrega los calendarios laborales y ponen como ejemplo el de 2023 que “ni siquiera llego a presentarse” y que no se convocan las mesas de negociación. Los sindicatos exponen que tampoco se han nombrado a los miembros del comité de salud y muestran su temor a que la administración municipal soriana pueda cumplir con la ley de estabilización que da como plazo hasta finales de 2024.

Los sindicatos han presentado ya varias reclamaciones y señalan que la inspección de trabajo ya ha acreditado “faltas graves y muy graves” que “podrán tener sanciones económicas que tendríamos que pagar todos los sorianos”, avisan. En total, en 2023 fueron 7 procedimientos de denuncia iniciados ante la inspección de trabajo por varios de los aspectos antes señalados.