Pescadería Duruelo | Relevo generacional para aunar novedad y tradición en el pueblo

Un almuerzo con la familia, una cena romántica en la que probar algo especial, una merienda con amigos... La comida nos une, nos permite descubrir cosas nuevas y ampliar nuestros horizontes. Pero en los momentos importantes, no todo vale y menos, en lo que al pescado se refiere. Asesorar según la temporada, ofrecer el mejor producto en el estado de limpieza adecuado o recomendar qué pieza conviene a cada dieta. Esas son sólo algunas de las cosas que Pescadería Duruelo, ubicada en la calle Santiago Lafuente, 2, de Duruelo de la Sierra, hace cada día. Una atención especializada digna de una tienda especializada que el mundo rural se merece tanto en su día a día como en las ocasiones más especiales.

Roberto Terrel y Cristina Gómez se hicieron cargo en 2015 de esta pescadería que solía regentar la madre de ella y casi una década después, no podrían estar más contentos. Estos dos jóvenes no dudaron en asumir el relevo generacional de este negocio familiar que llevaba décadas prestando un servicio esencial a los durolenses. Abandonando su vida en Soria capital ganaron "tranquilidad", "conciliación" y facilidad para criar a sus hijos. Tienen "todo a 5 minutos" y sobre todo, gracias al trabajo de otros tantos como ellos, "hacemos todas las compras en el pueblo y si no aquí, en el pueblo de al lado".

Servicios como el que prestan estos jóvenes en su pescadería, en palabras del propio Roberto, "asientan población". Porque no se trata sólo de tener lo básico en los pueblos, sino de que los vecinos puedan disponer de comercios especializados sin necesidad de desplazarse. "Hay gente que quiere pescado para los bebés o gente mayor y hay que dejárselo limpio, sin piel o sin espinas, o para recetas con sashimi y producto que se consume crudo como en los tartar de atún o salmón", detalla Roberto. Y es que, explica, "cada vez más gente joven lo pide, parejas que no pueden ir a un restaurante japonés y buscan recetas por Internet para hacerlo en casa". Y gracias a la pescadería de su pueblo, pueden probar cosas nuevas sin salir de Duruelo.

En este empeño por aunar bajo el mismo techo las novedades del sector con un trato cercano y personal de toda la vida, la Pescadería Duruelo ha dado el salto a las redes sociales, con Instagram y WhatsApp. "Los viernes solemos hacer un video explicando el género que tenemos, enseñando el mostrador y lo publicamos en nuestro estado de WhatsApp", cuenta Roberto. Una forma de continuar modernizando el comercio local y rural para que pueda adaptarse a los nuevos hábitos de los consumidores.

Pescadería Duruelo lleva su pueblo por bandera y esa es la clave de su éxito. Tras 8 años de trabajo, Cristina y Roberto ya conocen perfectamente a sus vecinos. "Sabemos sus gustos y trabajamos nuestro producto acorde a lo que ellos quieren", explica. Y siempre con un trato "familiar y cercano". Roberto reconoce que su negocio es "muy agradecido" y se alegra de poder tratar directamente con todos sus clientes, que se encargan de mostrarles su gratitud por el trabajo que realizan: "Tenemos clientes todos los días que se preocupan por nosotros y nosotros también nos preocupamos por ellos". Porque Pescadería Duruelo es mucho más que una tienda, igual que los cientos de comercios repartidos por toda la provincia que luchan para que sus vecinos puedan tener siempre lo mejor.