La certificación regional bajo el sistema PEFC supera en la Comunidad las 800.000 hectáreas en 2023
Castilla y León lidera la gestión forestal y sostenibilidad en España. Según apuntan en Cesefor, al cierre de 2023 la Comunidad se posiciona como la que más superficie aporta a la certificación forestal en el sistema PEFC a escala nacional. La superficie adscrita al certificado regional de la región, en diciembre de 2023, asciende a 824.589 hectáreas. De esta superficie, aproximadamente el 92% corresponde a unidades de gestión pública, y el 8% restante, de gestión privada.
Como es sabido, la certificación forestal es un mecanismo que garantiza al consumidor que los productos forestales y los derivados que adquiere (madera, biomasa, corcho, resina, frutos silvestres, etc.) proceden de montes gestionados de manera sostenible. El cumplimiento de los requisitos de la certificación es evaluado por una auditoría externa en base a estándares reconocidos internacionalmente.
Cesefor ha participado en este proceso de certificación de los montes castellano-leoneses bajo su papel de secretaría de la Mesa Intersectorial de la Madera de Castilla y León (MIMCyL), órgano para el que además realiza las labores de seguimiento y control del sistema de certificación, así como de asistencia técnica en las auditorías anuales.
Estas cifras de ‘bosques sostenibles’ se han alcanzado de la mano de la MIMCyL, la entidad que, en estrecha colaboración con la Junta de Castilla y León, promueve e impulsa la gestión forestal sostenible y que estableció hace más de 15 años un sistema voluntario por el que cualquier propietario o gestor de un monte ubicado en la Comunidad Autónoma de Castilla y León, puede formar parte de la Certificación Forestal Regional bajo el sistema PEFC. En la actualidad, la superficie certificada está repartida en un total de 640 unidades de gestión forestal, siendo el 72% de titularidad pública y el 28% restante, privada.
Obtener un certificado de Gestión Forestal Sostenible beneficia tanto a los propietarios de los terrenos forestales como a la sociedad en general, ya que la certificación forestal:
Para adherirse a la Certificación Forestal Regional de Castilla y León, el propietario forestal, ya comprometido con la gestión de su monte, debe de contar con un plan de gestión forestal de su propiedad y ejecutar esa planificación, además de presentar la solicitud de adhesión a la Secretaría de la MIMCyL. A partir de ese momento, el propietario se compromete a cumplir con los requisitos de certificación de gestión forestal sostenible establecidos por el sistema PEFC.
Todos los agentes implicados en la planificación forestal intervienen en este proceso, porque el Plan de Gestión ha de aprobarse por la administración forestal competente en la materia (que, en Castilla y León recae en la Dirección General de Patrimonio Natural y Política Forestal de la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio de la Junta de Castilla y León). Cuando la legislación nacional y autonómica no exija dicha aprobación, el plan de gestión estará visado por alguno de los colegios profesionales de ingenieros de montes o ingenieros técnicos forestales y graduados en ingeniería forestal y del medio natural.
Una vez certificada la sostenibilidad de esos montes, la MIMCyL, asistida en la secretaría y en trabajos técnicos por la Fundación Cesefor y con la colaboración y apoyo de la Junta de Castilla y León, se ocupa del mantenimiento y coordinación de la Certificación Forestal Regional de Castilla y León.
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