El técnico atiende a Soria Noticias durante la semana de parón. “Lo necesitábamos porque el equipo está cansado al tener la exigencia de ganar cada partido”, manifiesta.
Si hay un equipo que está haciendo historia este curso es el Balonmano Soria. Los de Jordi Lluelles están completando una temporada de matrícula de honor, asentándose en el primer puesto de la clasificación, con ocho puntos más que el tercero, después de haber sumado 24 victorias de manera consecutiva.
Tras esta vorágine de encuentros, los amarillos descansan este fin de semana antes del sprint final de la fase regular y de un más que probable play off. En esa tesitura, su técnico se sienta con Soria Noticias para analizar el tramo más importante de la competición.
Lluelles afirma que este fin de semana de descanso y el de Semana Santa van a venir muy bien a sus pupilos a nivel físico y psíquico: “Nos va a servir de última parada en el surtidor. La exigencia de ganar todos los encuentros cansa al equipo. Notaba al principio de estos días que ya nos costaba recuperar”.
No obstante, a pesar de esa situación, el técnico se muestra tranquilo, “ya que estamos buscando motivaciones a corto plazo, como los récords”. En ese sentido, reconoce que el final de la fase regular va a ser apasionante, midiéndose a rivales de la talla de Santoña, ULE o Avilesina.
El vestuario es consciente de lo que está logrando y no para de ponerse metas. Además de tratar de ganar los 30 partidos de la fase regular, los amarillos sueñan con alcanzar los 33 (contando los tres de play off): “Hacen bastante la broma de Fernando Alonso”.
Por su parte, el preparador catalán, con los pies en el suelo, se centra en preparar cada duelo con una plantilla que ha superado todas expectativas. Sin embargo, este piensa que si se mantuviera el bloque de cara al próximo curso “estos jugadores seguirían creciendo; este año no van a alcanzar su tope”.
En esa dirección, al ser cuestionado sobre la posibilidad de si este conjunto es el mejor que ha tenido Soria desde que está él en el banquillo, este prefiere no hacer comparaciones, “al no tener nunca la misma plantilla”. Ahora, sí que confirma que el rendimiento está siendo más inmediato por la capacidad que tuvieron el año pasado de mantener a la gran mayoría del bloque.
Con su presencia casi asegurada en la fase de ascenso a División de Honor Plata, Jordi Lluelles abarca la posibilidad de que se juegue en el San Andrés. “En el caso de que se diera, me gustaría que el club también invirtiera en un hotel para poder concentrarnos porque es un factor diferencial”, apunta.
A la hora de analizar el jugar o no en casa, el catalán hace hincapié en que “todo tiene sus pros y sus contras, aunque sería espectacular ascender en el San Andrés con una afición que llenaría el pabellón durante los tres días; en el lado contrario, tendríamos más presión”.
De cara a esa cita que se disputará el tercer fin de semana de mayo, el entrenador del Balonmano Soria recalca que va a haber combinados muy complicados como el Triana, “escuadra a la que nadie querrá enfrentarse”. Asimismo, al hablar de su propio equipo, Lluelles es consciente de que “seremos también la chica con la que nadie quiere bailar, aunque los méritos de atrás no importarán ya”.
A tal efecto, ha echado la vista a hace tres temporadas cuando ascendieron en Lanzarote, yendo como tapados. Con todo ello, el entrenador del conjunto amarillo vela armas y descansa antes de afrontar el sprint final de una campaña que quiere acabar con su equipo en División de Honor Plata.