Melanoma: Diagnóstico, tratamiento y síntomas

El melanoma es el cáncer de piel más peligroso y más raro, convirtiéndose en la principal causa de muerte por enfermedades de la piel. El Hospital Latorre de Soria explica que está causado por mutaciones genéticas en las células llamadas melanocitos. Estas células producen un pigmento llamado melanina que es responsable del color de la piel y del cabello.

El melanoma puede aparecer en la piel normal. En ocasiones se puede desarrollar en un lunar. Los lunares de nacimiento pueden transformarse en melanoma. Los más grandes presentes al nacer están en más riesgo de convertirse en melanoma. El riesgo de aparición se incrementa con la edad.

A tener en cuenta

Los factores predisponentes de presentar un melanoma son: tener piel blanca, ojos azules o verdes o cabello rubio o rojo; vivir en climas con sol o a grandes alturas; pasar mucho tiempo en altos niveles de luz solar intensa, debido al trabajo; tener una o más quemaduras de sol con ampollas durante la niñez o usar dispositivos para broncearse.

¿Cómo podemos darnos cuenta de que tenemos un melanoma? Un lunar, una llaga, una úlcera o un tumor sobre la piel pueden ser un signo de esto o de otro tipo de cáncer de piel. Una úlcera o tumor que sangra o cambia de color también puede ser un signo de cáncer de piel.

Otra manera para detectar un posible melanoma es buscar el “signo del patito feo”. Esto significa que el melanoma no luce como las otras manchas en el cuerpo. Sobresale como si fuera el patito feo de los cuentos infantiles. En cuanto tenga una sospecha clínica, debe acudir a su dermatólogo de confianza.

¿Cómo se trata?

Casi siempre es necesaria la cirugía. Se extirpa el cáncer de piel y la parte de tejido circundante. Si el cáncer se ha diseminado a ganglios linfáticos cercanos, estos también se pueden extirpar. Después de la cirugía, dependiendo del riesgo de que la enfermedad vuelva, es posible que le suministren quimioterapia o inmunoterapia.

Artículo en colaboración.