A pesar de un inicio de temporada “agónico, ya que los ríos bajan impracticables debido a las últimas tormentas”, el presidente de El Campano augura una campaña buena “con unos caudales estables y unas temperaturas adecuadas para esta práctica”.
Los aficionados a la pesca de la trucha están de enhorabuena en Soria. El pasado 30 de marzo comenzó una temporada que se alargará en los ríos regulados por embalse hasta el 15 de octubre. Por su parte, en los de alta montaña, la apertura de la campaña se retrasa al 27 de abril, mientras que su clausura se adelanta al 1 de julio.
Según nos explica el presidente de El Campano Soriano, Óscar Fernández. En estos últimos, las fechas son diferentes para favorecer el ciclo de reproducción de estos peces -también se cierran antes porque estos pierden caudal según se acerca el verano-.
Para la pesca de la trucha es obligatorio sacarse la licencia de Castilla y León. Desde el año pasado, esta es gratuita en la Comunidad. No obstante, en algunos tramos del río como en las aguas en régimen especial o en los cotos se debe solicitar un permiso en la página web de la Junta de Castilla y León o llamando al 012.
Este es gratuito en los AREC, mientras que en los cotos tiene un coste que va de los 12 a los 20 euros. “Soria es una provincia que siempre ha llamado la atención a los pescadores, acercándose mucha gente de otros lados. Además, eventos como los de El Campano Soriano ayudan a que se conozca más nuestro territorio”, afirma Fernández.
En la provincia, hay ciertos lugares en los que la pesca de la trucha es más fructífera. Sin lugar a dudas, el “padre de todos los ríos” es el Duero. En este, se pueden encontrar numerosos ejemplares en la zona de Pinares o debajo de la presa. Otra opción que encanta a los amantes de esta práctica es el río Ucero a su paso por El Burgo de Osma, tanto en la travesía como en el coto de Sotos.
Asimismo, el Tera y el Razón también aparecen como alternativas.
Las claves para que se viva una buena temporada de pesca radican en que los ríos mantengan un caudal estable con unas temperaturas que oscilen entre los ocho y los diez grados. Estas condiciones no se han cumplido en los primeros días de una campaña en los que estos “han bajado impracticables, debido al enorme número de tormentas que hemos tenido últimamente y al desembalse que estamos sufriendo”.
A pesar de esta situación, Fernández espera un curso muy bueno, “ya que todo lo que está pasando va a venir bien; se va a mantener un buen caudal”. En ese sentido, considera que con el avance de la primavera y con el aumento de las temperaturas llegará el mejor momento para disfrutar de este deporte.
La captura de la trucha se puede llevar a cabo de diferentes maneras. La que más emplean los pescadores es la pesca a mosca: “Está consiste en utilizar un equipo que cuenta con una línea, sintética o de seda, con un terminal con fluorocarbono. Dependiendo de la época se puede pescar a ninfa o a mosca seca”.
Por último, Óscar Fernández manifiesta que los más tradicionales ejecutan la captura a lance, empleando cucharilla.