La 7ª gala benéfica 'Vamos a dar el cante' tendrá lugar el viernes 26 de abril en el Palacio de la Audiencia. Participarán personalidades del mundo de la televisión, el deporte y hasta el clero soriano.
La 7ª gala benéfica 'Vamos a dar el cante' de ASOVICA ultima ya los detalles para deslumbrar a los sorianos en el Palacio de la Audiencia. Encabezan el cartel Patxi Irigoyen como maestro de ceremonias, Samuel Moreno, Suso Seca, Alberto Molinero, el padre Ángel y el padre Toño, David Ormazábal e Iago Benavides y el Club de Baloncesto Fuente del Rey, aunque también participarán grupos de teatro, canto y baile. Tendrá lugar el próximo 26 de abril en dos sesiones, a las 18:30 y a las 20:30 horas.
Susana Torres, directora de la gala, asegura que este evento tendrá un tono divertido y también emotivo, con canciones "muy conocidas": "Vamos a arriesgar un poquito con las actuaciones, va a haber alguna sorpresa, las imitaciones van a ser bastante fieles y Alberto Molinero será el que más se arriesgue, con una imitación eurovisiva". La cuestión técnica, según Torres, es "cada vez más profesional y complicada", ya que el objetivo siempre es "subir un escalón" con respecto al año anterior.
El objetivo de este evento no es sólo recaudar fondos para ayudar a becar los gastos de la entidad a aquellas personas que no disponen de suficiente capacidad económica, sino sensibilizar y concienciar a la sociedad. "Llevamos años trabajando en defensa de los derechos de las personas con problemas de salud mental, para conseguir una igualdad de oportunidades", explica Natalia Briongos, gerente de ASOVICA. Por ello, esta gala dará continuidad al relato narrado a lo largo de las dos ediciones anteriores. La primera se centró en los testimonios de los usuarios, la segunda en sus familiares y amigos y este año los protagonistas serán los profesionales y "cómo vivimos el apoyo a las personas con problemas de salud mental", en palabras de Briongos.
"Cuando uno tiene un problema de salud mental tiene la sensación de que está en un universo paralelo", cuenta Torres. Es por ello que este año la escenografía representará un universo de planetas blancos en el que comienzan a surgir planetas naranjas, simbolizando a las personas con salud mental. Estos planetas se dedican a intentar parecer blancos, pero de repente aparecen planetas dorados, que simbolizan su red de apoyo y los profesionales que les ayudan, que ayudan a integrar los planetas naranjas en los blancos y "respetar su independencia, que es lo que hace la asociación". El año pasado la gala contó con un gran apoyo de la sociedad soriana, llenando prácticamente la primera sesión y ocupando el 80% de las butacas en la segunda y este año confían en reclutar aún más asistentes. Las entradas se pueden adquirir ya en la sede de ASOVICA en la avenida Duques de Soria, junto a la cuadrilla de San Esteban, y en el céntrico bar Más que 2, en la plaza del Tubo, a un precio de 10€.
ASOVICA da cobertura a unas 150 personas y aunque no ha aumentado el número de usuarios de forma notable, sí que están percibiendo un cambio de perfil en las personas atendidas. "Cada vez son los jóvenes que no sólo tienen un problema de salud mental sino también de adicciones a sustancias o a aparatos electrónicos y redes sociales", explica Briongos. Celebra que desde la pandemia se hable más de problemáticas como el suicidio o la autolesión, lo que ayuda a detectarlo antes y con mayor facilidad. Actualmente están inmersos en una campaña de concienciación que les está llevando por distintos centros escolares de la provincia, para que desde Infantil hasta Bachillerato, los jóvenes sean capaces de "detectar estos problemas y pedir ayuda a tiempo". "Una detección temprana de cualquier tipo de problema de salud física o mental tiene mejor pronóstico y una mejor resolución", añade.
En términos de integración laboral de las personas con problemas de salud mental, acuerdos con empresas como FICO siguen siendo imprescindibles y han logrado mantenerse a pesar de las dificultades económicas. "Hacen un esfuerzo para no dejarnos en el aire, estaríamos encantados de ampliarla pero siguen siendo 29 personas y en el otro centro, más dedicado al sector servicios, tenemos a otras 47 personas contratadas", enumera la gerente de la asociación. Aun así, considera que este tipo de enfermedades continúan estando estigmatizadas y que las empresas suelen decantarse más por contratar a personas con otro tipo de dolencias. Por eso, confía en que poco a poco se pueda "perder el miedo a la salud mental".