El sindicato mayoritario de la Policía Nacional en Castilla y León, JUPOL, remitió una carta al vicepresidente García-Gallardo exponiendo las graves deficiencias en materia de seguridad laboral que viven sus agentes. Mariano Veganzones, consejero de Industria, Comercio y Empleo, ha analizado las reclamaciones y solicitado al Ministerio del Interior que actúe en 4 puntos urgentes para garantizar la seguridad laboral de los agentes que trabajan en la Comunidad.
“La falta de ropa térmica es clamorosa” o “ninguna dependencia policial en Castilla y León dispone de desfibriladores”. Son algunas de las reclamaciones que JUPOL, sindicato mayoritario de la Policía Nacional en Castilla y León, hizo llegar al vicepresidente de la Junta, Juan García-Gallardo.
Tras una reunión mantenida con Mariano Veganzones, consejero de Industria, Comercio y Empleo, y al haber analizado las denuncias realizadas por los propios agentes que trabajan y velan por la seguridad de los castellanos y leoneses, se ha remitido una carta al Ministerio del Interior solicitando la intervención urgente en cuatro puntos:
1. Falta de ropa térmica adecuada.
2. Ausencia de ropa de trabajo adaptada a las estaciones de invierno y verano.
3. Selección de calzado de trabajo inadecuado.
4. Carencia de material de primeros auxilios en los lugares de trabajo para proteger contra los accidentes cardiovasculares (desfibriladores automáticos o semiautomáticos).
Tras recibir de mano del vicepresidente García-Gallardo las reclamaciones de los agentes de la Policía Nacional de Castilla y León, la Consejería de Industria, Comercio y Empleo ha podido certificar que éstas se sustentan en la realidad que los propios agentes tienen que vivir en la Comunidad.
Por ello, en su escrito remitido al Ministerio del Interior, Mariano Veganzones ha destacado que “parece a todas luces necesario que los agentes de la Policía Nacional tengan a disposición una indumentaria de trabajo adecuada”, cosa que no sucede en la actualidad.
En su denuncia, los agentes de la Policía Nacional, aseguran que se ven obligados a trabajar indistintamente con la ropa de invierno y de verano, provocando situaciones como utilizar la misma indumentaria, trabajando tanto “en Burgos a 10 grados bajo cero, como en Sevilla en verano con cerca de 50 grados”.
Del mismo modo, Veganzones destaca en su misiva al Ministerio que la implementación de desfibriladores DESA debe considerarse de forma urgente. En Castilla y León “ninguna dependencia policial dispone de desfibriladores”. Una circunstancia preocupante, ya que “la fibrilación ventricular primaria es la causa de la mayor parte de los fallecimientos que se producen en las primeras horas del infarto agudo de miocardio”.
En la carta de Veganzones dirigida al Ministerio del Interior, el consejero se ofrece a adoptar cuantas medidas sean necesarias para que el Cuerpo de Policía Nacional en Castilla y León pueda desempeñar su importante tarea diaria con la mayor seguridad laboral, aunque la competencia sobre esta cuestión dependa exclusivamente del Ministerio.
“Contribuir a que se respeten los valores de seguridad y protección de los funcionarios del Cuerpo de Policías Nacionales debe ser un motivo de orgullo y profunda satisfacción de quienes la dirigen y de quienes en ella trabajan”, dando muestra de la solidaridad de las distintas administraciones con las fuerzas del orden público.
Veganzones termina su carta defendiendo que “la colaboración entre administraciones públicas nos permite conseguir el fin común de reducir la siniestralidad y el absentismo laboral.”, concluye el consejero de Industria, Comercio y Empleo en su escrito.
La carta completa, en este enlace.