¿Un amistoso para el Atlético en Soria? Que se lo pregunten a Azpilicueta

El Burgo de Osma respiraba ayer en rojo y blanco. Cientos de aficionados colchoneros de todo el país se desplazaron hasta el sureste de la provincia de Soria para presenciar un partido que es todo un clásico del verano. Porque el Memorial Jesús Gil no es un amistoso más, son 90 minutos de fútbol entre el Numancia y el Atlético de Madrid, pero sobre todo, de gestos a una afición entregada a sus ídolos.

Oficialmente la cita arrancaba a las 18:00h, pero la fiesta comenzó mucho antes. Con la apertura de las puertas en el Municipal, se desataba la euforia entre los más jóvenes, que aprovechaban para coger el mejor sitio para intentar cazar algún autógrafo. Carlos Fernández era uno de ellos. Llegado desde Madrid, contaba a Soria Noticias que "conseguí convencer a mi padre para venir a Soria y ver de cerca a Correa o a Lemar".

David Ros, de Murchante (Navarra), aspiraba un poco más alto: "He hecho una pancarta para llamar la atención de Azpilicueta y ver si se anima a darme la camiseta". Aprovechó las vacaciones para viajar a Soria junto con su amigo Miguel y aseguraron a este medio estar "disfrutando a tope". Ane y Daniela, de Lerma (Burgos), llegaron también cargadas con su pancarta. Sin pretender firma ni camiseta, su intención solo era animar al capitán Koke. Se les escapaban las sonrisas y las miradas de complicidad cuando esta servidora les preguntó si "es guapo".

Los padres de Ane acompañaron a las dos amigas burgalesas hasta Soria. "Instagram, y un anuncio del Atléti ha sido el culpable" del viaje, confiesan. El progenitor no parecía muy disgustado por ello y resumió a la perfección los motivos, seguramente de todos los aficionados, para desplazarse hasta la provincia más despoblada de España a ver un partido de fútbol de pretemporada. "Es verano y podemos permitírnos la escapada, el viaje hasta El Burgo es cómodo, la hora es la mejor para disfrutar del deporte y, además, no todos los días tienes la oportunidad de ver a los jugadores tan cerca y a un precio tan económico".

El partido

El resultado del encuentro era lo de menos. Los 90 minutos reglamentarios finalizaban con un justo 1-1 en el marcador y se decidía en los penaltis (5-3). El Numancia plantaba cara a todo un Atlético de Madrid en un partido con una primera parte intensa y emocionante y una segunda en la que el calor pasaba factura a jugadores y grada.

Comenzaron dominando los del Cholo con muchas ocasiones. Hombres como Koke, Lemar, y Correa saltaron al campo con pocas ganas de perder el tiempo y muchas de deleitar al personal. También entregado se mostró Azpilicueta, y en él encontramos la prueba de que el partido no fue tan amistoso como lo pintan.

Tras el 1-0 (gol de Riquelme), el Numancia se enchufó y Alain Ribeiro marcó tras una interesante jugada. Un lance en el que el navarro recibió un fuerte codazo que le dejó la cara resentida. Con la sangre todavía brotando del golpe, se quejó intensamente al colegiado. Esto le valió la amarilla, cartulina que vio justo antes de retirarse del terreno de juego por 'lesión'.

"Buenas sensaciones" en el Numancia

A los sorianos este primer partido de la temporada les permite volver a ilusionarse con el que, por otra parte, debería ser un obligado ascenso a Primera RFEF. Los de Aitor Calle jugaron de tú a tú a los colchoneros y dejaron un buen catálogo de detalles de calidad. Aunque la segunda parte perdió en vistosidad, el técnico rojillo se mostró satisfecho ante los medios por el "entrenamiento exigente ante un rival de primera categoría".

El bilbaíno destacó el trabajo de "un grupo muy generoso en los esfuerzos y con una predisposición espectacular". Considera que "las sensaciones son buenas" entre un equipo que debe mantener "esa resilencia y ese sacrificio" durante la temporada, aunque reconoce que "quedan muchos matices que pulir" antes de compenzar en septiembre.