Romancito: "Hay un diamante en bruto fuera de Madrid y Barcelona para los creadores de contenido"

Recorrer todas las provincias de España, en transporte público y buscando los pequeños detalles que el turismo convencional suele pasar por alto. Ese es el gran objetivo de Román Socías, conocido en redes sociales como ‘Romancito’ (@romansocias), un creador de contenido de Mendoza, Argentina, que lleva afincado en España desde 2021. Con más de 600.000 seguidores en redes sociales, Romancito hace en Soria su parada número 17 y aprovecha para dejarse enamorar por una provincia repleta de naturaleza, historia, magia y leyendas.

¿Cómo surgió la idea de empezar este viaje?

Yo soy un apasionado de viajar y aprender. Cuando llegué a España me asenté en Valencia y un día dije: voy a grabar alguna provincia que tenga cerca. Y viajé a Murcia, aunque todos me decían que para qué iba a ir. Yo mostré lo que me parecía curioso y a la gente le encantó porque fui a una provincia a la que no todo el mundo va a hacer turismo, fui más allá de Madrid, Sevilla y Barcelona. Así que en julio del año pasado me propuse mostrarle a la gente que hay mucho que ver en cada provincia española: curiosidades, leyendas... Y siempre me llega el mismo comentario: yo soy de aquí y no sabía las cosas que estás contando. No solemos valorar lo que tenemos cerca y eso es lo que hace que la gente me siga.

¿Qué sabías de Soria antes de venir?

Lo que sabe la mayoría, que es la provincia menos poblada de España. Pensé que al ser chiquitita iba a tener pocas cosas pero empecé a investigar y me sorprendí, y al estar ya aquí, ni hablar.

¿Cuáles han sido los prejuicios sobre la provincia que más has escuchado desde que llegaste a España?

Me pasa en muchos sitios. Me dicen que no vaya. A Soria lo que todo el mundo me decía es que me iba a costar llegar. Por suerte, desde Madrid había tren, aunque también me dijeron que nadie lo usa. Pero existe, y si más gente lo usara, igual habría más horarios. Luego me dijeron que no había nada, que me iba a aburrir. Y todo el mundo me dijo que con un día me alcanzaba, pero no es la realidad. Yo me tomé una semana, no paré y me faltó mucho por ver. Si vas de escapada un día vas a tener que repetir, porque solo con ir a la ermita, la ruta literaria, probar la comida… Casi ningún destino es solo para verlo por arriba. Y para nada fue aburrido, hay mucho para ver, probar, experiencias, naturaleza, museos, rutas…

"No solemos valorar lo que tenemos cerca y eso es lo que hace que la gente me siga"

¿Qué fue lo que más te sorprendió?

El Burgo de Osma. Fue uno de los lugares que menos investigué, iba pensando en dar un recorrido y grabar tres calles, pero es un pueblo súper completo, con la catedral que es maravillosa, el castillo, el paseo por el río... También me encantó cómo la capital y la naturaleza están totalmente fusionadas, no te tienes que ir a 20 o 40 km. para respirar aire puro. Y para ser una ciudad muy pequeña tiene mucho patrimonio concentrado. A nivel de gastronomía me encantaron los torreznos. Pensé que no me iban a gustar porque no suelo ser muy fan de ese tipo de comida, pero están muy buenos. Y probé unos cuantos.

¿Qué te quedó pendiente para la próxima vez?

De Soria pude salir poco. Me quedé con ganas de ver el claustro de la concatedral, el museo y San Saturio por dentro, que estaban todos en obras. La ermita por fuera es una vista preciosa, pero así tengo una excusa para volver. También me quedé con la espinita de ir a muchos pueblos, al Cañón del Río Lobos, la fortaleza de Gormaz, la Laguna Negra... Pero no hay transporte público.

¿Es eso lo peor de hacer turismo en la provincia?

Es su principal fallo. Yo me muevo en transporte público hasta las provincias y dentro de ellas, y aquí solo pude visitar El Burgo y Medinaceli. Lo puedo entender, porque no hay oferta y demanda, pero es un círculo vicioso. No es la única provincia en la que lo he visto, pasa sobre todo en las más despobladas. No llega el transporte público y hay muchos pueblos que se quedan vacíos. Lo que provoca es que un turista vaya a la capital, por ejemplo desde Madrid, y no salga de allí.

¿Qué has aprendido en este viaje?

Que las pequeñas ciudades son muchas veces las que más me aportan, porque son de las que menos uno sabe y menos información se puede encontrar. Es lo que me pasó con Soria. Y de España, yo llegué emigrando sabiendo lo justo y he descubierto una gran mezcla de culturas.

"No hay que eliminar el turismo, hay que saberlo distribuir"

¿Cómo animarías a un turista a venir a Soria?

Le diría que vaya más allá de lo típico, porque si en Internet buscas qué ver en España te van a salir los mismos 5 lugares que están teniendo problemas de masificación. A veces no es donde mejor se pasa porque hay tanta gente y las cosas son tan caras... No digo que no haya que visitarlas, pero hay alternativas y tesoros súper interesantes que se disfrutan mucho más.

Como creador de contenido sé que las redes son una herramienta muy beneficiosa para el turismo, que es un motor económico importante para combatir la despoblación, pero también es una herramienta que puede utilizarse muy mal. Siempre promovemos los mismos destinos y me encantaría que el resto de influencers diseminaran el turismo y favorecieran a los pequeños pueblos. A mí me ha ido bien, la gente lo disfruta. Hay un diamante en bruto fuera de Madrid y Barcelona para los creadores de contenido.

El turismo y su sostenibilidad son ahora mismo un debate polémico...

El turismo puede aportar, pero tiene que ser responsable y respetar el lugar. España puede recibir más turistas, pero si solo van a Benidorm, Madrid o Barcelona, o se quedan en Airbnbs, se genera una burbuja.

Yo creo que puede ser la solución para ciudades como Soria o Teruel. Ávila es un ejemplo de que un turismo controlado puede ser un motor económico para que una ciudad brille. Creadores de contenido, medios de comunicación y políticos somos parte de la solución y del problema. Si lo hacemos bien, España puede seguir creciendo. Si lo hacemos mal, el precio de alquileres y comida seguirá subiendo y el ciudadano, sufriendo. No hay que eliminarlo, hay que saberlo distribuir.

Imágenes: VIKSAR Fotografía