De los 775 trabajadores sanitarios agredidos en 2023, 290 son enfermeras y el Sindicato de Enfermería SATSE alerta de que este problema sigue afectando especialmente a las mujeres, y en concreto, a las enfermeras, una profesión mayoritariamente femenina.
Las enfermeras y enfermeros vuelven a ser un año más la categoría profesional del Servicio de Salud de Castilla y León (Sacyl) que más agresiones sufre en su trabajo, con 290 agredidas el pasado año 2023, y especialmente las mujeres (271 de los 290 profesionales enfermeros agredidos).
Según los datos aportados hoy en la reunión del Observatorio de Agresiones al personal sanitario de SACYL, estos incidentes se incrementaron un 2,9% en total, registrándose 698 en 2023, frente a los 678 de 2022.
De los datos extraídos del Observatorio destaca, a juicio de SATSE Castilla y León, algo que es “preocupante”: el sesgo de género que se produce en estos incidentes es una tendencia que se mantiene en el tiempo. Las mujeres sanitarias siguen siendo los profesionales más agredidos en Sacyl, un problema muy grave que sufren especialmente las enfermeras.
Por ello, desde la organización sindical se afirma que “La Administración sanitaria debería tenerlo en cuenta a la hora de estudiar medidas que eviten esta realidad que puede producir graves consecuencias físicas y psicológicas en las enfermeras de Sacyl”, añade SATSE
Al mismo tiempo, destaca el aumento de agresiones en algunas áreas de salud de la Comunidad, como en la del Bierzo, en cuyo hospital ha crecido un 80% el número de trabajadores agredidos; en la de Palencia, en la que fueron agredidos 25 trabajadores en el hospital y 21 en los centros de salud, o en Salamanca, que registró 44 sanitarios agredidos en el ámbito hospitalario y 43 en primaria. También en Emergencias Sanitarias aumentan un 50% las agresiones a sanitarios.
SATSE resalta que los motivos principales por los que se producen las agresiones son la disconformidad con la atención recibida y las demandas del usuario, lo que también debe llevar a la Administración sanitaria a promover medidas al respecto.
Más enfermeras
En este sentido, el Sindicato de Enfermería resalta que unos servicios sanitarios bien dotados de profesionales enfermeras contribuyen a que la calidad de la asistencia sea mayor y así lo perciba la población, con lo que podría reducirse el número de incidentes y agresiones que se están produciendo.
Además, de las campañas de sensibilización y concienciación que recuerden que los profesionales sanitarios son autoridad pública, o medidas como un aumento del número de vigilantes en los servicios donde más agresiones se producen y un incremento de las penas de toda índole, SATSE recuerda que la asistencia sanitaria debe contar con suficientes profesionales enfermeras para poder atender las necesidades que se producen en cada ámbito, especialmente en aquellas unidades con mayor incidencia de agresiones e incidentes.
Plantillas enfermeras escasas producen sobrecarga en los profesionales, un aumento del tiempo de espera y malestar en la población que pueden contribuir a que se produzcan más agresiones en los centros sanitarios.
Además, SATSE considera que la atención a los profesionales agredidos debe mejorar por parte de la Administración y deben ser las propias gerencias las que denuncien a los agresores porque los incidentes se producen contra sus trabajadores, al tiempo que les prestan asistencia psicológica, traslada SATSE.
“La Administración debe velar por la seguridad de sus trabajadores y por su protección”, ya que “estos incidentes no solo tienen consecuencias muy negativas para los profesionales, sino también para la calidad de la asistencia que se presta en los centros e instituciones sanitarias”, añade el Sindicato de Enfermería.