Los celestes afianzan su poder en casa zanjando con un 3-0 la contienda, si bien Arenal Emevé presenta una gran oposición en la última manga del duelo.
Este sábado Grupo Herce Soria lograba su victoria más plácida de lo que va de campeonato al cerrar por 3-0 (25-17, 25-18, 25-22) el duelo ante Arenal Emevé Lugo. Pese a la claridad del marcador, el duelo no fue un paseo militar para los sorianos, ya que en el tercer asalto Arenal Emevé Lugo estuvo por delante en el marcador hasta la recta final del set, cuando varios errores y el acierto local acabaron por darle la vuelta al marcador y sellar el triunfo local.
Curiosidades del juego, en los tres sets del partido comenzó el cuadro lucense con ventaja en el marcador, también en el primero, con un 2-5 que demostraba qué conjunto había entrado mejor en el duelo. Sin embargo, el equipo de Toribio logró la igualada de forma vertiginosa (5-5), e incluso lograba una renta considerable con el 10-7. José Valle trató de contener el juego local con los tiempos muertos y con el relevo de Villar por Edwards en la dirección del juego, pero nada iba a ser efectivo ante la superioridad local. Y es que Grupo Herce Soria no paraba de incrementar su renta en el marcador, hasta imponerse con 25-17.
Como si de un calco se tratara, comenzó el segundo asalto. De hecho, el 10-7 volvía a llegar acompañado de un tiempo muerto visitante, después de que los locales hubieran dado la vuelta a un marcador liderado de forma anecdótica por los gallegos. A partir de ahí, el juego también se repitió en otros aspectos. Los sorianos eran superiores en ataque, no mostraban fisuras y Arjones tocaba siempre la tecla adecuada (25-18).
Sería el tercer parcial el que presentase unas sensaciones, marcador y juego muy diferentes. Lo que no cambiaría sería la iniciativa visitante en el marcador en los primeros compases, pero en esta ocasión, sería mucho más amplia y duradera. De hecho, los sorianos se vieron atrapados por el juego lucense, que lograba rotar con facilidad ahora con Valle en la colocación desde el inicio. El colocador estaba inspirado y sus atacantes también, logrando rotar con facilidad tanto con los centrales como en las puntas, con Bouza por cuatro y López de opuesto (7-10). Los sorianos se acercaron en el marcador con el 9-10, pero no lograron salvo igualar la contienda (11-11). La iniciativa en el marcador era siempre visitante, los lucenses apenas cometían errores y los locales eran incapaces de presionar lo suficiente con el saque para dificultar la anotación de Arenal Emevé. El ímpetu defensivo visitante tampoco permitía al ataque soriano sentirse cómodo y el set avanzaba con control gallego (19-20). Sin embargo, al llegar a los puntos calientes, dos errores de ataque consecutivos de Emevé permitían a Soria ponerse por delante (22-21). A partir de ese momento, el instinto depredador local salió a relucir y el cuadro de Valle no encontró reacción (25-22).