En el XXX Cross Internacional Ciudad de Soria ha conseguido cruzar la meta en primer lugar por tercera vez. En féminas, la joven Mercy Chepkemoi ha puesto de manifiesto su descaro y su talento. Los mejores atletas españoles fueron Marta García y Nassim Hassaous
El 30 aniversario del Campo a través internacional de Soria no defraudó, con una jornada de temperatura agradable en un monte Valonsadero rebosante de verdor y ocre otoñal, y sobre todo, una matinal maratoniana de atletismo, desde los más pequeños hasta las dos carreras absolutas de exquisito nivel. La prueba masculina, de ritmo endiablado, fue dominada por el favorito, el burundés Rodrigue Kwizera que, por tercera vez, inscribe su nombre de ganador de la prueba, igualando la gesta de su compatriota Timothy Toroitich. En mujeres se esperaba una prueba abierta, y lo fue, con la joven Mercy Chepkemoi poniendo de manifiesto su descaro y su talento.
El atleta soriano Daniel Mateo Angulo, volvía a competir en casa tras un año de ausencia en Valonsadero, el único de toda su vida deportiva, así pues, sus ganas salían a relucir con una primera vuelta en la que puso el ritmo en cabeza. Su ímpetu se trasladó a los atletas africanos, que no tardaron en darle el relevo, especialmente el combativo etíope Wegene Chala. Por detrás, Kwizera se refugiaba en el pelotón con los españoles.
El cambio de Edige Ntakarutimana al llegar al primer paso por vuelta se tornaba en exigente y reaccionaban los favoritos, con Chala, Kwizera, Mattew Kipchumba, Ayede Tadesse y Hosea Kiplangat en fila de auno. Mateo iba cediendo posiciones, mientras Daniel Arce pasaba como primer español en un pelotón de diez corredores.
No se había cumplido la segunda vuelta cuando Ntakarutimana pagaba caro el esfuerzo de haber avivado el ritmo. Kwizera lideraba la prueba, probablemente buscando hacer un primer desgaste en el abundante grupo de africanos. Los que mejor aguantaban la propuesta del atleta de Playas de Castellón serían Chala, Kipsang y Tadesse. Kiplangat también perdía comba, mientras el grupo perseguidor, ahora de seis integrantes, estaba comandando por otro corredor que ha crecido en Valonsadero, el segoviano Javi Guerra, que cumplía años en la jornada. Nassim Hassasous, Pablo Sánchez, Dani Arce, Ibrahim Buras y el portugués Rui Pinto conformaban el listado, seguidos a pocos metros por Daniel Mateo Angulo.
En la última vuelta ya nadie era capaz de seguir de cerca a Kwizera. Kipsang dejaba unos metros de distancia, con Tadesse y Chala sin entregarse, conscientes de la importancia de la pelea por el podio. Los africanos que iban cediendo paso quedaban desperdigados, mientras que los españoles mantenían el grupo, ahora de solo cuatro componentes, el noruego Buras, Hassasous, Guerra y Sánchez.
Sin sorpresas, Kwizera volaba para llevarse la victoria, motivado por revalidar triunfo. Segundo sería un formidable Tadesse, radiante en la meta, mientras que la tercera plaza sería dirimida por milímetros en pugna entre Chala y Kipsang, llevándose el gato al agua el segundo.
En la cita femenina la carrera se presentaba abierta sobre el papel y, por tanto, de difícil pronóstico. Y el espectáculo iba a estar a la altura. Las africanas en seguida fueron abriendo camino de forma paulatina, con una valiente Marta Pérez que era la única española que salía a su estela durante la primera vuelta. Cristina Espejo, Sara Reimondo, María Luz Tesuri y Lidia Campo, conformaban un equipo perseguidor.
Una de las principales favoritas, la burundesa Francine Niyomukunzi marcaba el ritmo también en el segundo paso por vuelta, con las keniatas Chepkemoi dejando hacer, Sharon, Diana y Mercy. Por detrás, Marta Pérez, cada vez más alejada, seguía siendo la mejor española, con Espejo cediendo más terreno y quedando aislada del grupo perseguidor, cada vez más reducido.
Sonaba la campana y Mercy Chepkemoi comenzaba a presentarse como un serio obstáculo para Niyomukunzi, mientras por detrás, Sharon se convertía en la primera africana en perder comba. Marta Pérez seguía a lo suyo, pero ahora era Lidia Campo la que cambiaba el ritmo para intentar dar caza a la soriana.
En una última vuelta de infarto, Mercy Chepkemoi cambiaba el ritmo y dejaba atrás a Niyomukunzi. La tercera plaza sería para Diana Chepkemoi y cuarta, Sharon. La espectacular carrera de la atleta local, Marta Pérez, tendría premio en forma de quinta plaza, seguida por una aguerrida Lidia Campo.
Rodrigue Kwizera se mostraba muy contento por la victoria en Soria y nada más cruzar la meta recordaba que era su tercer triunfo en la prueba. El burundés reconocía que se trata de una cita especial para él por este motivo y aseguraba que le gustaría “volver el próximo año para intentar ganar otra vez” para intentar incrementar su renta y convertirse en el primer corredor en lograr cuatro victorias en Valonsadero. Sobre el desarrollo de la carrera, explicaba que en la primera vuelta trató de estar en el grupo para “evitar un poco el aire”. La carrera siguió “con un ritmo muy rápido, ha sido duro porque hay muchas cuestas”, finalizaba.
Por su parte, la ganadora Mercy Chepkemoi, afirmaba estar “muy contenta porque no ha sido una carrera fácil”. Además, consideraba que “es un terreno duro, pero me he sentido fuerte”. Por último, feliz por subir al podio en una carrera tan importante como la de Valonsadero, la atleta daba más valor a su triunfo por la entidad de sus rivales, algunas de ellas familia y compatriotas a las que conoce bien.