El proyecto de Suellacabras 'Un paseo por la Historia' da sus primeros pasos

Para ejecutar el proyecto ‘Un paseo por la Historia’, el Ayuntamiento de Suellacabras ha presentado una memoria valorada en la que se plantea una intervención en el Castro de los Castellares, con el objetivo de ponerlo en valor. Actualmente, el yacimiento está inaccesible por el crecimiento de la vegetación y, por lo tanto, incomprensible. La única zona en la que se intuyen restos es la parte de la muralla que delimita el yacimiento por su lado occidental. Asimismo, hay un cartel explicativo del castro completamente obsoleto e ilegible.

Estos trabajos pretenden actualizar la información, documentar y limpiar la vegetación del castro, para que se puedan contemplar los restos. La superficie que intervenir es aproximadamente 0,5 hectáreas, que están delimitadas por el lado este por aproximadamente un metro desde la cimentación de la muralla y una longitud de muralla de unos 140 metros, que es la que se puede ver por debajo de la vegetación. Desde la muralla, en el lado noroeste el camino es el límite, formando una especie de triángulo.

La primera fase de esta intervención es el desbroce de la vegetación, para poder tomar decisiones posteriores, se va a realizar con supervisión arqueológica, para que estos trabajos se lleven a cabo de acuerdo con los criterios de protección sobre el patrimonio histórico.

La Comisión Territorial de Patrimonio Cultural ha autorizado el proyecto ‘Un paseo por la Historia’ en la forma solicitada y el control arqueológico necesario para esta intervención.

Este enclave, datado en la etapa celtibérica que cuenta con declaración como Bien de Interés Cultural como zona arqueológica, fue objeto de excavaciones arqueológicas en el pasado por parte de Blas Taracena en 1925, identificando parte del perímetro de su muralla y de su urbanismo. Su entorno arqueológico, que alberga una necrópolis tardorromana/visigoda fue objeto de trabajos por parte de Lorenzo Aguirre en 1858. Desde entonces no se habían realizado actuaciones en el yacimiento por lo que se encuentra en mal estado de conservación y sus estructuras están ocultas y se están viendo afectadas por la vegetación que las cubre.

El control arqueológico de los trabajos de desbroce de vegetación se realizará en una franja de 0,5 hectáreas, en el sector occidental de la muralla del castro, además de un sondeo transversal a la muralla de 30 metros cuadrados para llevar a cabo su documentación (características constructivas, estratigrafía, etc.) y estado de conservación. Se realizará asimismo la fotogrametría de la excavación y limpieza resultante.