Envidiable la salud de esta mujer que nacida en Ocenilla, vive ahora, sin requerir ni medicación ni bastón, en la residencia de Fuentetoba.
Apolonia Lafuente Gonzalo nació el 9 de febrero de 1923 en Ocenilla en el seno de una famila muy humilde. Vivió la Guerra Civil y tuvo que irse a servir muy joven a la capital soriana tras la contienda, para ganarse la vida en unos tiempos de gran dureza económica.
Su padre era el barbero de la localidad, con lo que los ingresos en la familia eran escasos. Ella, en su labor en Soria percibía tan solo lo necesario para subsistir apenas en una época de restricciones.
Conoció a su marido en Osma, contrayendo matrimonio con Lorenzo, cuando tenía 27 años, por lo que dejó su trabajo como trabajadora doméstica y pasó a atender a los cuidados de sus suegros y las labores del hogar.
Tuvo tres hijos. Su marido trabajó en la construcción mientras que ella ocupó su vida en el cuidado de los suyos.
Actualmente vive en la residencia Gerosoria, en Fuentetoba. Pasado su siglo de vida, mantiene un buen estado de salud, "envidable" dicen los suyos, quienes aseguran que no requiere ningún tipo de medicamentos. Tan solo cierta deficiencia en la visión es la única carencia que acredita.
Nunca a pisado un hospital, ni precisa bastón para caminar. Su ánimo lleva a que no exprese ningún tipo de dolor tampoco.
Hoy, Apolonia celebraba los dos años con los que sobrepasa su siglo de existencia. Un día que ha transcurrido rodeada de los suyos y expresando el cariño que les dispensa y sin disimular su alegría.