La Junta invertirá casi 0,8M€ en videovigilancia contra incendios en León
Imagen del Pico Cueto, en León. /Jta.
El proyecto, financiado con fondos europeos, busca ampliar la cobertura y mejorará la eficacia en la lucha contra el fuego.
La Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, a través de la Fundación Patrimonio Natural, ha licitado la instalación de un avanzado sistema de videovigilancia para la detección y seguimiento de incendios forestales en la provincia de León. La inversión, que asciende a 789.000 euros, se financiará con el Fondo de Transición Justa de la Unión Europea.
El sistema de detección de incendios forestales de la Junta se compone actualmente de puestos fijos de vigilancia, agentes medioambientales, medios de extinción y sistemas de vigilancia con cámaras. Desde 2006, se ha implementado este sistema en varias provincias de la Comunidad, proporcionando imágenes 24 horas al día, 365 días al año, y mejorando la información disponible para los Centros Provinciales de Mando (CPM).
En León, estas herramientas se instalaron entre 2019 y 2020, con 19 cámaras ubicadas principalmente en las comarcas forestales de El Bierzo. El nuevo contrato permitirá renovar estas cámaras e instalar 16 adicionales, extendiendo la cobertura visual a la mayor parte de la provincia y priorizando las zonas con mayor masa forestal. En total, León contará con 35 dispositivos de videovigilancia.
La ampliación del sistema cubrirá visualmente toda la parte norte de la provincia, desde la capital y las comarcas de Gradefes, Cistierna, Boñar, La Robla y, de norte a sur, Villablino, La Magdalena, Benavides, Astorga, La Bañeza y Truchas, además de las comarcas de El Bierzo.
Con este despliegue, el sistema de videovigilancia cubrirá una superficie potencial de 1.200.000 hectáreas, de las 1.558.000 hectáreas de la provincia de León, con visual directa sobre 523.000 hectáreas, el 34% del territorio provincial.
Un sistema eficaz para la prevención y extinción
El sistema de videovigilancia cumple funciones de prevención y extinción de incendios, priorizando las primeras. Permite vigilar un área de entre 8 y 25 kilómetros alrededor de cada ubicación, facilitando la identificación de posibles focos de fuego. Además, permite verificar alertas, evitar falsas alarmas, geoposicionar el punto visualizado y realizar un seguimiento en tiempo real del incendio.
Entre las ventajas del sistema, destaca la disminución del tiempo de respuesta de los medios de extinción gracias a la pronta localización de los focos, la posibilidad de archivar alarmas para análisis posteriores y el seguimiento de quemas controladas.
El sistema se gestiona desde los CPM y el CAM (Centro Autonómico de Mando) mediante un software que facilita la programación de las cámaras y ofrece imágenes en tiempo real. La eficacia del sistema se basa en la facilidad de manejo del software y su integración en los centros de mando.