Un Numancia fallón y sin ideas se deja el liderato en Luanco y el Pontevedra tiene ahora la mano
Un solitario tanto de Isma Cerro, tras un penalti evitable de Gexan, condena a un Numancia que fue incapaz de generar ocasiones y estuvo impreciso en controles y pases. Ahora el Pontevedra, que ha ganado al Guijuelo, es líder y saca dos puntos al Numancia.
Enésimo enfrentamiento en remoto entre el Numancia y el Pontevedra por la plaza que da el ascenso directo a la Primera Federación. Los sorianos visitaban al Marino de Luanco , mientras que el Pontevedra recibía en casa al Guijuelo. Aitor Calle apostó por repetir el once que el otro día ante el Salamanca cuajó un gran encuentro, con la única novedad de la vuelta al once de Rubén Sanchidrian.
Comenzaba el partido como un auténtico correcalles, con el balón de área a área y mucha velocidad. No estaba cómodo el cuadro soriano con ese guion de partido y poco a poco los de Aitor Calle fueron controlando el esférico y alargando las posesiones. Ese dominio soriano se tradujo también en una pausa en el ritmo de partido y de las ocasiones. Posesiones largas del Numancia, mucho pase horizontal y ninguna ocasión de peligro.
El Marino de Luanco no estaba incómodo con ese planteamiento. En ocasiones presionaba arriba la salida de balón visitante mientras que otras veces se replegaba atrás y buscaba hacer daño a una zaga soriana muy adelantada. En un par de ocasiones forzó a los defensores rojillos a hacer tarjetas porque les habían ganado la espalda. El balón era soriano pero el peligro, sin ser mucho, era astur.
Pudo adelantarse el Marino de Luanco en un fallo de entendimiento de los centrales. También Bonilla o el propio Kuda cometieron imprecisiones que pudieron salir cara. Finalmente fue Gexan quien se lo puso en bandeja con un penalti de esos que dan rabia. Se tiró al suelo para bloquear un pase de la muerte y acabó tocando el balón con la mano. Ahí ya el Marino no perdonó e Ismael Cerro transformó la pena máxima.
Lo intentó el Numancia tras el gol en el 33, pero sin volverse loco y sin encontrar soluciones para tener presencia en el área rival. Jony y Góngora lo intentaron desde lejos, los corners y las faltas laterales tampoco encontraban rematador. Y así, se llegó al descanso con la pelota en el tejado de Aitor Calle que debía plantear alternativas para darle la vuelta al partido y más con el Pontevedra ganando y recuperando el liderato.
Tardo el míster rojillo en realizar los cambios hasta el minuto 58 y el primer cuarto de hora de la segunda mitad fue regalado en la empresa por remontar el encuentro y recuperar el liderato. Finalmente, dio entrada a Carlos Dieste y Marc Fuentes retirando del campo a David Sanz y a un Góngora que hoy estuvo participativo, pero poco entonado.
Con muchas imprecisiones en controles y entregas, por puro guion del encuentro el Numancia fue poco a poco encerrando a los asturianos en su campo. Pero más allá del avance posicional del encuentro, para los intereses sorianos, los tiros seguían siendo desde lejos y sin peligro y el balón parado tampoco encontraba nunca rematador.
De hecho, las mejores ocasiones seguían siendo asturianas. Como cuando en el 72 Pinin pudo sentenciar el encuentro, cosa que impidieron Kuda primero, luego la madera y luego de nuevo Kuda. Sin ideas, el tiempo se iba escapando y aunque Calle dio entrada a Grande y a Dani Fernández el Numancia no lograba encontrar un camino lógico y repetible para generar peligro.
No había manera y no la hubo. El Numancia perdía en este su partido 25 de la temporada su segundo encuentro de la temporada. Y con la derrota, el Numancia perdía el liderato porque un Pontevedra sólido ganaba en casa al Guijuelo. Ahora, los gallegos tienen 2 puntos de ventaja a falta de 9 partidos por jugar, entre ellos el del próximo día 19 de marzo que medirá a ambos conjuntos en Pasarón. Una auténtico finalísima a la que, todo parece indicar, el Numancia llegará sin margen de error y con la obligación de tener más ideas y estar más acertado que hoy.
