Casi 500.000 personas han visto en los últimos días el tanto que el colegiado, Pérez Lasa, anuló a Javi Del Pino en el Camp Nou.
La historia del Numancia está llena de noches históricas en las que los sorianos se vestían de David para competir contra Goliat en el fútbol profesional. A pesar de ser un equipo modesto, de una de las provincias más humildes del país, los rojillos han plantado cara a transatlánticos como el F.C. Barcelona o el Real Madrid.
Precisamente, en las últimas horas, se ha hecho viral un gol anulado que los numantinos consiguieron en el Camp Nou en la temporada 2008/2009, la última que militaron en Primera División. El usuario @Marod__84 ha compartido en Twitter un cabezazo de Javi del Pino, tras asistencia de Barkero, que acabó en el fondo de las mallas de Víctor Valdés, pero que el colegiado, Pérez Lasa, canceló de manera incomprensible.
El árbitro consideró que el talentoso mediapunta soriano cometió falta en la pugna con un histórico como Andrés Iniesta. La estupefacción porque ese tanto no subiera al marcador fue tal que ha llegado hasta nuestros días. En apenas unas horas, el vídeo de la acción ha llegado a casi 500.000 personas.
El Numancia plantó cara aquella lejana noche del sábado 22 de enero al F.C. Barcelona en la ciudad condal. Independientemente del resultado final, los sorianos disputaron un buen encuentro que llegó con empate a cero al descanso. Tras el paso por vestuarios, Messi y Etoo pusieron por delante a una escuadra catalana dirigida por aquel entonces por Pep Guardiola.
A pesar de que se puso cuesta arriba, los rojillos no se rindieron y recortaron distancias gracias a un tanto de Barkero, uno de los nombres propios de ese curso. Sin embargo, los blaugranas sacaron musculo para sentenciar la contienda en los minutos finales con los tantos de Henry y de Messi.
Después de ese tropiezo, los de Sergije Kresic (a las pocas semanas sería destituido y llegaría Pacheta al banquillo) se situaron en la decimoséptima posición de la tabla con 20 puntos, tres más que un Osasuna que marcaba los puestos de descenso a una Segunda División a la que acabarían cayendo los sorianos.