El técnico numantino reconoció que se “complican” las opciones de campeonar después de la victoria del Pontevedra: “Mientras hay vida hay esperanza, pero se aleja mucho esa posibilidad”.
El Numancia ha dejado escapar en apenas cinco días la mayor parte de sus opciones de ascender de forma directa a Primera RFEF. Tras caer frente al Pontevedra y al Escobedo, en este último partido, desplegando un muy mal juego, los rojillos se sitúan a siete puntos del líder a falta de seis jornadas por disputarse.
Después de lo ocurrido, su entrenador, Aitor Calle, ha calificado estos días como “la semana negra” del combinado rojillo. “Teníamos mucha ilusión puesta. Queríamos salir reforzados y la realidad ha sido muy diferente. No hemos conseguido resultados y además hemos encadenado varios momentos en los que no hemos jugado bien”, señaló.
El técnico reconoció que los suyos no estuvieron bien en la primera parte ante el Escobedo. Aunque tampoco sufrieron en labores defensivas, los sorianos no fueron capaces de generar lo suficiente para adelantarse en el marcador. En cambio, cuando peor se pusieron las cosas con el 1-0 de los locales, los numantinos completaron sus mejores minutos, empatando y teniendo ocasiones para darle la vuelta al luminoso: “Hemos gozado de varias claras, pero hay que aprovechar cuando el campo está hacia tu lado”.
A pesar de ello, un nuevo despiste defensivo, en el que los cántabros se colaron a la espalda de la zaga soriana, supuso el definitivo 2-1. Con todo ello, Aitor Calle también afirmó que esperaba “algo más” de la gente que no participa habitualmente. No obstante, también es cierto que “acumulamos mucho cansancio y emociones”.
Sabedor de que es “un momento complicado”, su objetivo radica en levantar la moral de sus pupilos y en “volver a ser el equipo que hemos sido durante toda la campaña, aprendiendo de lo vivido esta semana y de lo exigente de la categoría”.
Por último, al ser preguntado por la distancia con el Pontevedra, el preparador vasco confesó que se “complica muchísimo la cosa, aunque mientras hay vida hay esperanza”.