La iniciativa intergeneracional entre jóvenes aprendices y residentes ancianos ha transformado mutuamente sus vidas, creando vínculos significativos que trascienden décadas.
Una veintena de alumnos de 2º curso de Formación Profesional Básica del CIFP Pico Frentes, que cursan las especialidades de Mantenimiento de Vehículos, Electricidad y Electrónica, y Carpintería y Mueble de entre 15 y 17 años, han tomado parte en el proyecto 'El valor de la experiencia' junto con jubilados de la residencia Los Royales. Una iniciativa que conjuga aprendizaje y servicio para crear vínculos entre generaciones y sensibilizar sobre la soledad en la tercera edad.
La iniciativa partió de la lectura del libro 'Dominga habla sola', de Elisabeth Justicia, que llevó a reflexionar sobre el aislamiento que sufren muchas personas mayores. A través de debates, murales y actividades creativas, los estudiantes profundizaron en temas como el respeto, el paso del tiempo y la importancia de valorar la experiencia de los mayores.
El programa incluyó tres encuentros significativos en la residencia. En el primero, estudiantes y residentes participaron en dinámicas de grupo con juegos como Tangram y Jenga, además de actividades de entrevistas personales que favorecieron el conocimiento mutuo. La segunda visita consistió en un taller de manualidades donde juntos crearon adornos navideños, fomentando la creatividad y el trabajo en equipo. El tercer encuentro, ya en época navideña, permitió a los alumnos entregar los adornos como regalo, compartiendo un almuerzo y disfrutando de un animado bingo musical con villancicos.
Como colofón del proyecto, fueron los mayores quienes visitaron el centro de FP. Allí, los alumnos actuaron como guías, mostrando los talleres de sus respectivas especialidades y explicando en qué consisten sus estudios. La experiencia permitió a los mayores comprobar cómo han evolucionado los oficios y la sociedad, comparando sus experiencias con las nuevas metodologías y tecnologías utilizadas hoy en lo que es la formación. Un encuentro donde tradición e innovación se dieron la mano.
Según indican en el Pico Frentes, esta experiencia ha demostrado ser enriquecedora para todos los participantes. "Ha sido mucho más que una actividad educativa: ha sido una experiencia transformadora que ha dejado huella en todos sus participantes". Han apuntado que para los jubilados ha supuesto una oportunidad para romper la barrera de la soledad y sentirse escuchados, valorados y acompañados. Para los alumnos, han tomado nota de una lección de vida que les ha permitido verse a sí mismos de una manera diferente, demostrarse su capacidad para generar un impacto positivo en la sociedad y descubrir que su formación no solo los prepara para un oficio, sino también para ser ciudadanos comprometidos.
En el lado docente del centro educativo Para los profesores esta iniciativa ha supuesto una prueba del "enorme valor del voluntariado en la educación, no solo como una herramienta de aprendizaje, sino como un signo indiscutible de calidad educativa". Así mismo, expresan que ha permitido fortalecer los vínculos con el alumnado y fomentar el trabajo interdisciplinar dentro del equipo docente y una oportunidad para consolidar el trabajo colaborativo a nivel de centro, demostrando que la educación puede y debe trascender las aulas para generar un impacto real en la comunidad.
Esta iniciativa ha sido posible gracias a la colaboración entre la residencia Los Royales y el CIFP Pico Frentes, dos entidades que han unido esfuerzos para impulsar y apoyar el proyecto. Su colaboración ha permitido que el aprendizaje se convierta en una experiencia viva, en la que jóvenes y mayores han encontrado un espacio de convivencia y enriquecimiento mutuo. Este trabajo conjunto ha evidenciado la importancia de tejer alianzas entre el ámbito educativo y el social para dar respuesta a los retos a los que se enfrenta la sociedad actual.