El Contraataque: Mal partido, pero victoria que debe dar alas al Numancia
Los rojillos disputaron un fútbol muy plano, sin generar apenas ocasiones. Sin embargo, en este momento de la temporada, tras lo sucedido, lo único importante es sumar de tres. Considero que esta victoria debe dar moral al equipo de cara al tramo decisivo de la competición. En caso de que las sensaciones no mejoren después de los tres puntos de ayer, sí que me preocuparía.
El Numancia se reencontró con la victoria en el momento preciso. Después de tirar por tierra las opciones de ascenso directo en el último mes, los rojillos se ataron los machos para asegurar la segunda posición frente al Real Ávila, su mayor amenaza en estos momentos. Aunque no fue su mejor partido -el fútbol siguió siendo muy plano-, aprovechó sus ocasiones para ganar con los goles de Sanchidrián y Jony.
El duelo empezó con un Real Ávila, dispuesto a llevar la batuta del encuentro. Los abulenses se mostraron cómodos con balón, moviendo la pelota, constantemente; eso sí, sin crear peligro. La mayoría de ellas eras posesiones estériles. Por su parte, el cuadro numantino trataba de hacerse fuerte en defensa para generar desde ahí.
Los primeros compases del duelo fueron bastante aburridos, dado que ninguno de los contendientes pisó las áreas rivales. Los máximos acercamientos de ambos fueron dos disparos lejanos que se fueron por encima de las porterías. Afortunadamente, el Numancia, en la única jugada trenzada del duelo, se adelantó gracias a un buen control de Jony y a un disparo certero de un Sanchidrián que volvió a ser de lo más destacado del encuentro.
El extremo se echó una vez más el equipo a las espaldas en la faceta ofensiva. Prueba de ello es que también fue el protagonista en la expulsión de Álex Moreno justo antes del descanso. Tras el paso por vestuarios y aunque estaban con diez, los abulenses se hicieron de nuevo amos y señores del esférico. Independientemente de que no generaban peligro, buscaban el empate por ambas bandas con varios centros. En ese aspecto, Dorronsoro, que volvió a la portería, se mostró muy seguro.
Con ese contexto, la afición soriana expresó su malestar, pitando durante los primeros compases de la segunda parte por lo que estaba viendo sobre el terreno de juego. Esa reacción parece que reactivó a unos futbolistas que adelantaron líneas de presión, dificultando la salida del balón del Real Ávila y recuperando balones en zonas muy peligrosas. Esa leve mejoría permitió a los numantinos sentenciar el encuentro y prácticamente la segunda posición de la tabla con la diana de un Jony que se reencontró con el gol mucho tiempo después.
Del final del partido, poco hay que analizar, dado que no ocurrió absolutamente nada. En cuanto a la faceta defensiva, poner en valor el partido de los numantinos, no permitiendo ocasiones, y de un Óscar de Frutos que tiene que ser el capitán general en este tramo decisivo de la liga.
El triunfo debe servir a los de Aitor Calle para recuperar sensaciones de cara al tramo más decisivo de la campaña. Con la versión de ayer, será muy difícil competir en unos play off en los que los equipos llegan al límite para ascender a Primera RFEF.
No obstante, calma. Pienso que este triunfo puede dar alas a un equipo que ha demostrado que es capaz de mucho más. Lo que me preocuparía sería no ver una evolución en el juego rojillo en el choque del próximo duelo ante el Guijuelo, rival de la zona baja de la tabla clasificatoria. Una victoria allí y un juego más convincente darían un plus a un conjunto que se juega el ascenso de categoría en apenas un mes.
