El skyline de este pueblo de Soria se viene abajo: "Buscaremos la forma de recordarlo"

San Esteban de Gormaz ha perdido esta mañana más que un símbolo. La Peña Magdalena, una roca de grandes dimensiones de gran valor para los vecinos, se ha venido abajo y, con ella, el pueblo se queda sin parte de su skyline. La imagen de la localidad ribereña nunca volverá a ser la misma y, aunque las causas todavía se desconocen, las grietas ya avisaban de lo que se ha demostrado como irremediable.

Daniel García, alcalde de San Esteban de Gormaz, reconoce en declaraciones para Soria Noticias que los daños en la roca habían ido a más durante los últimos meses. "Desde que se iniciaron las obras de la autovía y las voladuras, la separación en las grietas era mayor", afirma el primer edil, que añade que las lluvias de los últimos meses han podido ser fatales: "El tipo de piedra que tenemos es muy dura cuando se seca, pero se vuelve arcillosa con la humedad". Por ello, todos en el pueblo eran "conscientes de que esto podía pasar" aunque "nadie quería quitarla".

La Sociedad de Baldíos, propietaria de la Peña Magdalena, ya había iniciado los trabajos para intentar evitar este desenlace. García asegura que "esta misma mañana hemos visto un estudio realizado el 6 de mayo, se habían colocado testigos y la intención era acordonar la zona". También confirma esto a Soria Noticias Isabela Hernández, presidenta de la Sociedad de Baldíos, quien puntualiza que "se cuenta con técnicos especialistas que revisaban la Peña desde 2020".

Se habían analizado distintas alternativas, incluso se valoró "la posibilidad de desmontar la Peña Magdalena", pero "no había nada sospechoso que nos obligase a ello", incide Hernández. No ha habido tiempo para estas u otras reacciones. La estructura natural se ha "desprendido totalmente", afectando a la vía verde y también a los edificios cercanos. "Piedras de hasta cuatro toneladas han afectado a los bajos sin que, afortunadamente, se hayan producido daños estructurales", confirma el regidor sanestebeño.

Varios vecinos de la localidad coinciden en afirmar que ha sido "una suerte" que no haya ocurrido ninguna desgracia personal. Cuentan que el mercadillo de los miércoles se realiza en el punto donde hoy se ha producido el derrumbe y que "podríamos estar hablando de una desgracia". La oposición en el Ayuntamiento de San Esteban prefiere no pronunciarse al respecto. Este medio ha contactado con María Luisa Aguilera, portavoz del PSOE en el municipio y concejal sanestebeña, y no ha querido realizar declaraciones.

El objetivo a corto plazo, tanto del Ayuntamiento como de la Sociedad de Baldíos, es asegurar la zona y otras infraestructuras de la localidad de similares características. "Los técnicos examinarán el lugar y, si existen elementos peligrosos, se retirarán", señala la presidenta de la Sociedad de Baldíos. Además del castillo, preocupa especialmente la zona de las bodegas, aunque Daniel García recuerda que el Consistorio inició hace meses los trámites necesarios para "elaborar un plan director y un muro de contención que sirva para proteger nuestro patrimonio".

Las bodegas tradicionales de San Esteban son excavaciones que se realizaron en la montaña hace décadas. Los recovecos son prácticamente infinitos y las aguas subterráneas y filtraciones resultan muy difíciles de controlar. Para intentarlo se cuenta con la ayuda de un hidrogeólogo, un arquitecto experto en patrimonio y un abogado, pero "hay que seguir trabajando", refiere García.

A medio plazo, la Sociedad de Baldíos convocará a sus socios "para afrontar la situación con todas sus perspectivas: económicas, morales y humanas", asevera Isabela Hernández. El Ayuntamiento, por su parte, colaborará "con todo lo necesario" y "se estudiarán acciones para recordar el símbolo sanestebeño y que perdure en la memoria", concluye Daniel García.