Susto en Santa Bárbara por una amenaza de bomba

La Policía Nacional ha recibido esta mañana un aviso del servicio de emergencias 112 en el que se informaba de que un particular había recibido una llamada telefónica en la que, de forma confusa, se le indicaba que había una bomba "en Venerable". Este particular vive en un inmueble del portal 17 de la calle Venerable Palafox, esquina Merineros.

Inmediatamente, la Policía Nacional ha activado el protocolo de seguridad correspondiente y ha desalojado el edificio en el que reside la persona que ha recibido la llamada y ha acordonado la zona como medida de precaución.

Las primeras inspecciones realizadas sobre el terreno no han revelado indicios que confirmen la existencia de explosivo alguno, por lo que todo apunta a que podría tratarse de una falsa alarma. No obstante, las investigaciones siguen en curso y se han adoptado todas las medidas de seguridad pertinentes en estos casos. Francisco Moñux, jefe provincial de la Policía Nacional de Soria, confirma que en el dispositivo, además de los agentes de Policía Local, han participado una docena de nacionales. "Se han realizado tres requisas, las que obliga el protocolo" y "no se ha encontrado nada", señala.

Los vecinos aguardaban hasta hace unos minutos en la calle hasta poder regresar a sus hogares. Una de ellos contaba a Soria Noticias que "solo nos han pedido que saliésemos de casa porque había una amenaza de bomba". Lamentaba que "no tenemos más información y solo podemos esperar". A las 13:30 horas se les ha permitido volver a sus casas.

Investigación

La investigación continúa para identificar a la persona que realizó la llamada. Estos hechos pueden constituir un delito de desórdenes públicos (art. 561.1 del Código Penal), castigado hasta con penas de prisión, por provocar una falsa alarma que moviliza a los servicios de emergencia y genera alarma social.

Este artículo dice lo siguiente: "Quien afirme falsamente o simule una situación de peligro para la comunidad o la producción de un siniestro a consecuencia del cual es necesario prestar auxilio a otro, y con ello provoque la movilización de los servicios de policía, asistencia o salvamento, será castigado con la pena de prisión de tres meses y un día a un año o multa de tres a dieciocho meses.