El núcleo duro del Numancia: “Vinimos para devolver al equipo a dónde se merece estar”

El Numancia se juega este domingo a las 18:00h. toda una temporada y gran parte de su futuro. Después de varios años de sinsabores, los rojillos están a un paso de regresar a Primera RFEF, la tercera categoría del fútbol nacional. Tras el 0-0 en Pinilla frente al C.D. Teruel, los sorianos buscarán cerrar la eliminatoria en un estadio de Los Pajaritos en el que no cabrá ni un alfiler.

Pocos días antes de esa auténtica final, tres pesos pesados del equipo como Diego Royo, Rubén Sanchidrián y Alain Ribeiro se sientan con Soria Noticias para contarnos cómo está siendo la semana. En ese sentido, los tres se muestran con unas ganas inmensas de que llegue el encuentro, afirmando incluso que “se nos están haciendo largos los días”. A pesar de ello, el talentoso mediapunta vasco reconoce que estas jornadas les están viniendo bien para recuperarse y para concienciarse de que van a contar con más de 8000 personas a su favor en la grada: “Es por lo que llevamos peleando todo el curso”.

¿Cómo ven al equipo tras la ida?

Los numantinos sacaron un 0-0 en el partido de ida que les hace tener de cara la eliminatoria en este choque de vuelta, ya que en caso de finalizar en empate los 210 minutos, incluida una posible prórroga, los de Aitor Calle serían los que subirían después de finalizar en segunda posición la liga. Analizando aquel duelo, Sanchidrián afirma que es “un buen resultado” y que “todos hubiéramos firmado a principio de temporada jugarnos el ascenso delante de nuestra gente”. Por su parte, Diego Royo, que no se fía ni un pelo de su rival, señala que tienen que salir a ganar desde el minuto cero sin pensar que “estamos por delante” en el global.

Con el recuerdo de lo que ocurrió en el encuentro de vuelta ante el Getafe y que Ribeiro piensa que “nos puede venir bien para mantener las orejas tiesas”, destaca que “no solo tenemos que ir a por el ascenso; debemos regalar una victoria a nuestra afición y que celebren los goles que no pudieron hace dos semanas”.

Sobre el contrincante que tendrán enfrente, Royo explica que los turolenses le sorprendieron para bien, mostrándose como un equipo “trabajado, con las ideas claras y que no renuncia al balón”. Sin embargo, confía en los suyos y en poder aprovecharse de sus debilidades: “Podemos pillarles la espalda en transiciones rápidas”.

El recuerdo de Yecla puede servir al equipo

Los jugadores rojillos están muy mentalizados de la importancia de gestionar las emociones en un play off de ascenso. Después de todos los golpes que se llevaron la campaña pasada y esta, Ribeiro hace hincapié en que “debemos controlar la euforia, teniendo templanza y tranquilidad, dos cosas muy necesarias para estos últimos 90 minutos”. Por su parte, Sanchidrián añade que lo sucedido en Yecla en la final por el ascenso del año pasado “nos ha dado fuerzas en muchos momentos de esta campaña”. En esa dirección, explica que todas esas vivencias han ayudado a los jugadores más veteranos a la hora de impulsar al resto de compañeros para tratar de alcanzar la meta.

Los tres apuntan que las lágrimas de la Constitución “nos han servido para convertirnos en una piña y para tener claro que queremos transformar la tristeza de la temporada pasada en lágrimas de felicidad, festejando el ascenso en Los Pajaritos”. En definitiva, asumen que la desgracia en tierras murcianas, los ha hecho mucho más fuertes.

¿Cómo llegan individualmente?

Mientras que Sanchidrián llega como un tiro, erigiéndose en uno de los líderes del equipo en este tramo final de temporada, Diego Royo se muestra muy contento por haberse recuperado a tiempo para ayudar al equipo: “La verdad que no esperaba estar así. Han sido siete meses difíciles que pensaba que no se iban a acabar nunca”. Tras mucho esfuerzo, el central turiasonense ha logrado estar en el momento clave de la campaña: “Me encuentro bien y el míster me da confianza”.

Precisamente, al hablar del preparador vasco, reconoce que tiene una presión añadida, pero que cuenta con la confianza “de todos nosotros y de gran parte de la afición”. En su caso, Alain manifiesta que está más fresco de lo que esperaba al haber permanecido seis semanas alejado de los terrenos de juego por una lesión en el hombro: “Me hubiese gustado que no hubiese pasado, pero eso ha hecho que haya descansado un poco. Estoy en un gran momento y quiero empujar al equipo”, sentencia.

Los Pajaritos llenos: Ni una entrada se puede quedar en los bolsillos

La plantilla numantina está con muchas ganas de ver Los Pajaritos a reventar. Para lograrlo, inciden en que es fundamental que ninguna entrada se quede sin usar. “Qué no se lo piense nadie. Vamos a disfrutar de una experiencia muy bonita”, añade Sanchidrián, al tiempo que Ribeiro expone que “es mejor vivirlo a que te lo cuenten”.

Con todo, el querido extremo rojillo se emociona al indicar que va a ser una experiencia que “se nos va a quedar marcada en nuestras cabezas y en nuestros corazones; un día podremos contársela a nuestros descendientes”. Diego Royo, con centenares de partidos a sus espaldas, asegura que para él jugar delante de tanta gente supone una “motivación extra, dado que nunca he tenido a un público tan multitudinario a mi favor: es algo que tenemos que disfrutar”.

Por último, a Ribeiro, que confiesa que es muy sentimental, se le pone la piel de gallina al rememorar el gol que logró frente al Yeclano en Los Pajaritos con el estadio lleno: “Ha sido el momento más feliz de mi vida futbolística. Ojalá este año podamos celebrar el ascenso. Va a quedar para el recuerdo”.

¿Qué significaría para ellos subir a Primera RFEF?

Si en algo confían los tres, es en lograr el objetivo delante de su gente. Dejando a un lado cualquier tipo de presión, apuestan por el trabajo que vienen realizando desde julio para asaltar la Primera RFEF: “Sin ninguna duda creemos en nosotros. Somos los primeros que tenemos que tener ese pensamiento. Vamos a ponerle la guinda al pastel”.

Para Sanchidrián, alcanzar esa categoría supondría la recompensa al trabajo bien hecho “después de aportar mi granito de arena a un club tan histórico, pudiendo quedar en el recuerdo de los seguidores”. De la misma manera, Royo pone de relieve que “vinimos para ayudar a salir del bache a una entidad que no pasaba por sus mejores momentos y para devolverla a las categorías en las que la recordamos”. Calcando su pensamiento, Ribeiro reincide en que “debemos ayudarlo a abandonar esta categoría inmerecida”, afirmando que en caso de lograrlo sería el día más feliz de su carrera deportiva.

Alguna que otra promesa con el presi

Si los rojillos suben, los pesos pesados del vestuario tienen alguna que otra promesa. Diego Royo provoca a Sanchidrián con que le tocaría cortarse el bigote. Sin embargo, el extremo no termina de comprometerse, “ya que lo tenía apalabrado para hacerlo la temporada pasada y no lo conseguimos”.

A lo que sí que se atreve es a teñirse el pelo de rojo. Eso sí, no a cualquier precio. El futbolista numantino explica que el presidente, Patricio de Pedro, le retó a hacerlo los dos juntos en caso de subir a Primera RFEF: “Me pondré un tinte de los que se van”. Ribeiro también fijó con sus amigos cambiarse de look o tatuarse a la diosa Ocon en el tobillo con la fecha de este domingo.

Por último, Diego Royo dice que ya ha cumplido, tatuándose el caballito de Soria: “Mi pelo no se toca”. Con todo ello, el núcleo duro de este Numancia descuenta las horas para intentar hacer historia en un club en el que se sienten como en casa.