Los empleados de Iberdrola en Soria, en pie de guerra: reclaman la equiparación de salarios con el IPC

Las puertas de la sede central de Iberdrola en Soria han sido el escenario de una concentración pacífica por parte de los empleados de la compañía eléctrica para exigir la actualización de sus salarios con el Índice de Precios al Consumo (IPC).

Carlos Romera, delegado de CCOO en la representación laboral, ha indicado que la plantilla en la provincia, al igual que en todo el país, ha visto cómo se ha reducido el poder adquisitivo al no ser aplicado el IPC a los sueldos. ha incidido en que tras cinco meses de negociación con la empresa no se han producido avances, habida cuenta de que esta ha venido experimentando un gran crecimiento durante los últimos años. Algo que no se ve reflejado en las nóminas, que han ido subiendo un 0,7% llegando y, a partir de 2019, en torno al 3,7%. "Mientras, el IPC ha llegado a subir un 18%", ha calculado.

El representante laboral se ha referido también a que la compañía acumula amplias ganancias, más de 5.600 millones de euros durante el último balance, razón que es "más que suficiente" para atender a esta reclamación, a la que se suma "vincular los beneficios a los trabajadores y no solo a los accionistas o a los altos directivos que son quienes se llevan todo el dinero".

"No estamos de acuerdo con ese tipo de negociación", ha sentenciado Romera, añadiendo que los objetivos fijados por la empresa, como la construcción de redes o el montaje de parques fotovoltaicos o eólicos, son decididos unilateralmente por la dirección, sin que los trabajadores tengan capacidad de influir en ellos. "No tenemos nada que hacer contra eso, no podemos modificarlo", ha lamentado. Por ello ha insistido: "preferimos que sea el IPC lo que nos marque nuestra subida salarial, y no lo que marque la empresa".

La respuesta de la plantilla soriana a la convocatoria de huelga ha sido más que notoria. Con un seguimiento que Romera ha estimado en "un 90 por ciento" de los aproximadamente 80 empleados que conforman la plantilla, la unidad ha sido la tónica dominante tras cuatro años de reclamaciones. El portavoz ha reconocido que en lo referente a recursos materiales para el desempeño del trabajo "no hay ningún problema, Iberdrola siempre ha funcionado muy bien en ese sentido". No obstante, ha denunciado que últimamente la compañía "sí que está menospreciando a los trabajadores".

Como ejemplo de esta falta de consideración, el representante sindical ha recordado la dedicación y profesionalidad mostrada por la plantilla en situaciones críticas, como se hizo durante la borrasca Dana o en el reciente apagón que afectó a Soria y otras provincias, aunque estos gestos no se han visto reflejados en los salarios. En este punto ha confesado que el sentir de los empleados es que "se nos valore y que se nos equipare como todos lo demás".

La huelga de Iberdrola en Soria se enmarca en un panorama de movilizaciones a nivel nacional. La jornada de hoy ha sido oficada con el fin de "hacer presión" en una llamada que busca poner el foco en esta problemática.

Negociaciones

En cuanto al futuro inmediato de las negociaciones, el horizonte se presenta incierto, debido a la paralización de los encuentros entre las partes. Eso sí, "mientras no se nos dé lo que nosotros queremos, no vamos a ceder, porque es mucho tiempo esperando a que se nos iguale y a recuperar nuestro poder adquisitivo, que es lo importante", ha advertido con insistencia Romera. A pesar de la firmeza de la protesta, ha querido lanzar un mensaje de tranquilidad a los usuarios, asegurando que no se prevén afectaciones en el suministro eléctrico como consecuencia directa de esta huelga. "Yo creo que personalmente no, en este caso no. Únicamente es una queja que nosotros tenemos, pero a nivel servicio no va a haber ningún problema", ha confesado.

Ante los medios también ha declarado Agustín Llorente, empleado afiliado a CGT que se hallaba en el lugar en condición de trabajador. Se ha referido al "ambiente incómodo" con la empresa y ha aludido a que están acumulando pérdidas en sus hogares, urgiendo a la patronal a "sentarse a negociar" y desbloquear los encuentros. "Hasta ahora no hemos hecho nunca huelga en Iberdrola y estamos dispuestos a lo que venga. Esperamos algún tipo de reacción por parte de la empresa, la mayor eléctrica de Europa", ha confiado finalmente.

La jornada de protesta ha transcurrido con tranquilidad y discreta presencia policial, que no ha impedido el corte temporal al tráfico de la calle D del polígono de Las Casas.