La asociación Apadrina un Olivo, Premio Esteva 2025 por su modelo de recuperación rural integral

La asociación Amigos de Sarnago ha concedido el Premio Esteva 2025, en su segunda edición, a la asociación Apadrina un Olivo, en reconocimiento a su ejemplar trayectoria en la recuperación del olivar tradicional como herramienta de transformación ecológica, económica y social del medio rural. Este galardón subraya el impacto de un proyecto que se ha convertido en un referente de desarrollo sostenible y lucha contra la despoblación.

En su sede en Oliete (Teruel), Apadrina un Olivo trabaja incansablemente desde 2014 en la restauración de más de árboles centenarios que habían sido abandonados. Esta labor ha generado un vibrante ecosistema que se traduce en la creación de más de 40 empleos directos; ha evitado el cierre de la escuela rural; ha permitido reabrir la conservera de Alacón; inaugurar una almazara propia y poner en marcha espacios de innovación como los Despertadores Rurales Inteligentes, un modelo de coworking y emprendimiento en el entorno rural.

El proyecto se sustenta en una red de más de 9.000 apadrinamientos procedentes de 28 países diferentes. Gracias a este apoyo, la agrupación galardonada no solo ha conseguido recuperar árboles, sino que ha logrado revitalizar un pueblo entero, contribuyendo a fijar población, atraer turismo sostenible y fomentar el retorno del talento joven al medio rural.

La junta directiva de la asociación Amigos de Sarnago ha valorado especialmente el carácter integral y replicable de esta iniciativa turolense. Destacan cómo combina la recuperación del patrimonio natural con la innovación social, la educación ambiental y la economía circular. A ello se suma el importante impacto social de programas específicos como 'Apadrina Educa', y la reconocida calidad de su aceite 'Mi Olivo', que ha sido premiado en certámenes nacionales e internacionales.

El Premio Esteva, que se entrega anualmente, busca reconocer iniciativas inspiradoras que trabajan activamente por el futuro del mundo rural. En su primera edición, correspondiente a 2024, el galardón fue otorgado a la Fundación DEARTE de Medinaceli, por su destacada labor cultural y patrimonial en uno de los enclaves históricos más singulares de la provincia de Soria.

La ceremonia de entrega del galardón será oficiada en Sarnago, en el marco del ciclo cultural que se celebra durante la tercera semana de agosto. Este evento servirá para celebrar el compromiso y la innovación en la lucha contra la despoblación. El premio consiste en una recreación en miniatura de un arado romano, una obra artesanal realizada por el artista sarnagués Juan Ridruejo.

El objetivo del premio, explican en la asociación convocante, no es solo dar visibilidad a iniciativas exitosas, sino también inspirar a otros a seguir su ejemplo. Se consideran para este reconocimiento aquellos proyectos que hayan demostrado un impacto positivo tangible en su comunidad, ya sea a través de la creación de empleo, la promoción del turismo rural, la innovación en la agricultura, la revitalización cultural o cualquier otra forma de desarrollo sostenible.

La elección del nombre ‘esteva’ para este galardón es simbólica, ya que es la pieza que dirige toda la maquinaria para labrar la tierra. "Durante siglos, el arado romano se hincó en estas duras tierras removiendo los suelos para obtener su fruto con el que poder continuar viviendo en el territorio, al igual que ahora nosotros queremos remover conciencias y reconocer el trabajo de aquellos que, agarrados a la esteva de su particular arado, logran surcar los parajes despoblados y enraizarse con proyectos innovadores", señalan en la asociación Amigos de Sarnago, localidad perteneciente a San Pedro Manrique.