Cervero, en la fiesta del ascenso del Oviedo: “Jugó en el Numancia, que mola mucho, pero no hay nada”

El Oviedo ascendió el pasado sábado a Primera División 24 años después. A pesar de perder en tierras burgalesas por 1-0 en el encuentro de ida y de comenzar perdiendo en el Carlos Tartiere, los asturianos consiguieron darle la vuelta a la eliminatoria frente al Mirandés. Los goles de Cazorla, Ilyas Chaira y Portillo pusieron patas arriba a toda una ciudad.

Las celebraciones se alargaron durante todo el fin de semana con actos en varios puntos neurálgicos de Oviedo. En una de ellas, el exdelantero del Numancia, Diego Cervero, que actualmente ejerce de doctor en el primer equipo ovetense, cogió el micrófono, haciendo de maestro de ceremonias, presentando a varios compañeros.

En una de esas presentaciones, el exnumantino se acordó del equipo soriano a la hora de nombrar a Dani Calvo, otro jugador con pasado en Soria: “Jugó en el Numancia, que mola mucho, pero no hay nada. Es de Huesca, que mola mucho, pero no hay nada. Vino a Oviedo, le dio la camiseta a todos sus colegas, se gastó la pasta, vino aquí, porta el brazalete de capitán, con permiso de Santi Cazorla, se hizo de Oviedo, se compró una casa con jardín y os quiere invitar a todos en una barbacoa”.

Esas declaraciones no han sentado del todo bien a una afición numantina que le guarda un grato recuerdo a un jugador que, a pesar de estar unos pocos meses, fue fundamental para lograr el ascenso a Primera RFEF, con goles muy importantes como el que consiguió frente a la S.D. Tarazona.

Gesto, muy emotivo

Por su parte, Dani Calvo tomó la palabra para acordarse de un compañero que ya no está entre nosotros. El futbolista oscense le dedicó una canción a Pelayo Novo, mediocentro que militó durante varios cursos en el Real Oviedo, convirtiéndose en uno de los jugadores más queridos por sus seguidores.