Sanjuanera de pro: Dos trabajos, peñista y pocas ganas de que se terminen las fiestas

San Juan tiene muchas historias que la gente desconoce. Personas que se recorren miles de kilómetros por estar en sus días favoritos del año, amantes de estos festejos que aprovechan para pedir la mano a sus parejas o sorianos que no descansan ni un solo segundo, compaginando el trabajo y las fiestas cómo bien pueden. Esta última situación, es el caso de Ana Villalba.

A sus 25 años, compagina dos trabajos, técnica de laboratorio y camarera en el bar Airos, con su fervor por estos días como peñista de la ‘Poca Pena’. “Lo más duro es estar detrás de la barra”, sentencia. En ese sentido, confiesa que el día que peor la pasó fue el Viernes de ‘Toros’, ya que “todos mis amigos estaban de fiesta y yo también quería, pero no podía; venga a poner copas cuando lo que me hubiera gustado era estar al otro lado de la barra”.

A pesar de ello y tras cinco días sin parar ni un segundo, no pierde la sonrisa. Capaz de atender a clientes mientras nos atiende, reconoce que “las horas de sueños han sido pocas”. Por ejemplo, esta noche tan solo ha podido acostarse tres horas: “Al final me voy a dormir cuando empiezan las dianas. No obstante, estoy acostumbrada, dado que siempre trabajo para San Juan”.

En su otro trabajo como técnica de laboratorio, también ha tenido que esforzarse a lo largo de estos días. El Jueves ‘la Saca’ y el Domingo ‘de Calderas’ ha estado presente en él. Sin embargo, para ella es más duro estar en el bar: “Prefiero el laboratorio porque no ves lo que está pasando fuera y no eres consciente de estar en fiestas. En cambio, en el bar ves cómo la gente disfruta. Entre ellos, mis amigos. Han venido a verme más de lo que me hubiese gustado”.

Graduada como técnica de laboratorio y en el sector de la hostelería desde los 18 años, explica que compagina estos dos trabajos porque “es algo necesario; si fuera por gusto, ya me hubiera jubilado, pero como no se puede”. A ello, se le suma la comprensión de sus jefes durante estos días tan intensos para que pueda llegar a todo.

Aprovechar cada instante

A pesar de pasar tantas horas trabajando, Villalba ha sido capaz de organizarse para disfrutar de su primer año de peñista en la ‘Poca Pena’. La tarde del Miércoles ‘el Pregón’, el Interpeñas de la madrugada del Lunes ‘de Bailas’ y las rondas con la charanga por las tardes han sido sus momentos favoritos. Bueno, hasta hora: “Esta tarde me la he pedido libre para disfrutar a tope de las bailas y de la última noche”.

Tras esta experiencia como peñista, no duda en repetir sus pasos el próximo año, “aunque estando más libre”. Con todo, aunque parezca sorprendente, afirma que en estos instantes “es mayor la pena porque finalizan las fiestas que el cansancio que tengo”. Independientemente de que le duelen los pies, “eso tiene fácil solución: cuando llego a casa los meto en agua y seguimos”.

Poniéndole un diez a sus fiestas, se despide de sus últimos clientes antes de ser ella la que esté al otro lado de la barra.