No solo hubo templarios en el Cañón del Río Lobos: los secretos del Castillo Billido

El Cañón del Río Lobos esconde tesoros que van más allá de su famosa ermita y sus espectaculares paisajes. Uno de ellos es el Castillo Billido, un antiguo castro celtíbero con importantes vestigios romanos y visigodos, cuya historia y localización exacta están envueltas en un halo de misterio.

El Castillo Billido emerge como una atalaya ancestral en el corazón del Parque Natural del Cañón del Río Lobos, ofreciendo no solo magníficas vistas a ambos lados de su pequeña meseta aérea, sino también un viaje directo a través de las edades de Soria. Este yacimiento, que se asienta en una posición elevada y estratégica, fue un castro de la Primera Edad del Hierro, perteneciente a la llamada Cultura Castreña Soriana, que posteriormente fue romanizado y conoció también la presencia hispano-visigoda. Se trata de un auténtico crisol de culturas que hoy, lamentablemente, lucha contra el deterioro y el expolio.

Un emplazamiento estratégico desde la Edad del Hierro

La ubicación del Castillo Billido no fue casual. Los asentamientos de la Primera Edad del Hierro, como este, seguían un patrón muy definido en la Meseta: se erigían sobre pequeñas elevaciones, cercanos al cauce de un río pero resguardados de las vegas para evitar inundaciones. Esta elección estratégica les permitía, según los arqueólogos, asegurar la explotación de los suelos fértiles, acceder a recursos vitales como la leña y la caza en zonas elevadas, protegerse eficazmente de posibles ataques y utilizar el valle del río como vía natural para sus comunicaciones y el comercio. El Castillo Billido, con su privilegiada posición dominando el entorno del Cañón, cumple perfectamente estas características, lo que subraya su importancia en la antigüedad.

Las investigaciones, aunque no muy actualizadas –la referencia principal es el trabajo de Lucas Fernández, 'Castillo Billido, un castro romanizado en el cañón del río Lobos (Soria)', publicado en 1977–, han revelado la presencia de restos de cerámica, monedas y hebillas de la época del Bajo Imperio Romano. Además, se han hallado fragmentos de cerámica hispano-visigoda bien elaborada con decoración geométrica, testimonios de las sucesivas ocupaciones que tuvo este enclave.

Vestigios de un pasado glorioso

Originalmente, el Castillo Billido estaba protegido por piedras hincadas así como por murallas de mampostería. Sin embargo, el paso del tiempo y, sobre todo, la acción humana han hecho mella en estas estructuras, encontrándose hoy todo ello muy deteriorado y expoliado. La falta de protección efectiva y el hecho de ser una zona de difícil vigilancia han convertido a este valioso yacimiento en un blanco fácil para el expolio.

En la zona de enterramiento se localizaron varias tumbas consideradas tardorromanas (Bajo Imperio), donde se seguía la práctica de la inhumación, un rito que, según los expertos, podría estar ligada a la difusión del cristianismo.

Un legado que urge proteger e investigar

La información más detallada sobre el Castillo Billido data de hace varias décadas, lo que pone de manifiesto la urgente necesidad de nuevas investigaciones arqueológicas. Estos estudios permitirían actualizar el conocimiento sobre este fascinante asentamiento, evaluar su estado de conservación actual de forma precisa y, crucialmente, establecer medidas efectivas para su protección. Solo a través de un compromiso renovado con la investigación y la conservación se podrá garantizar que la cara secreta del Cañón del Río Lobos, con sus valiosos testimonios históricos, pueda ser comprendida, valorada y preservada para las futuras generaciones, evitando que el expolio y el inexorable paso del tiempo borren su importante legado. Mientras tanto, la observación de un paisaje precioso, añade un elemento de belleza al entorno de este tesoro soriano.

Así puedes llegar al Castillo Billido desde Casarejos: