El evento, que se celebrará del 22 al 24 de agosto, tendrá paradas en las localidades sorianas de Langa de Duero y Vinuesa, además de otros municipios de la Ribera, con el objetivo de fomentar el ciclismo y la seguridad vial entre los más jóvenes.
La IX Vuelta Ciclista Internacional Junior a la Ribera del Duero vuelve a ceder el protagonismo a los más jóvenes con la celebración, por segundo año consecutivo, de la PequeVuelta. Esta iniciativa, que este año adopta el sobrenombre de ‘La Riberita’, busca implicar a edades de cero a 16 años en uno de los eventos deportivos con importancia en esta demarcación, haciendo parada en las localidades sorianas de Langa de Duero y Vinuesa.
Impulsada por el Velo Club Ribera del Duero en colaboración con la organización de la ronda y los ayuntamientos anfitriones, la PequeVuelta persigue un doble objetivo. Por un lado, pretende que los más pequeños se sientan partícipes directos de una cita de trascendencia internacional y, por otro, busca fomentar un uso seguro de la bicicleta y mejorar la destreza de los jóvenes ciclistas en un entorno lúdico y educativo.
La participación está abierta a todos los niños y niñas que deseen sumarse a esta fiesta del ciclismo, que se desarrollará en paralelo a las tres etapas de la competición oficial. La organización ha preparado un completo programa de actividades que se llevarán a cabo en las localidades de salida y llegada de cada jornada, incluyendo Sotillo de la Ribera, Baños de Valdearados, Langa de Duero, Vinuesa, Pedrosa de Duero y Aranda de Duero.
Los jóvenes participantes tendrán la oportunidad de disfrutar de diversas pruebas diseñadas para poner a prueba su habilidad sobre las dos ruedas. Según detallan desde la organización, se promoverán iniciativas que incluyen una carrera de caracoles, el juego de la caja menguante y un completo circuito de habilidad. El objetivo es que los niños aprendan y se diviertan en un ambiente seguro y controlado.
Además, uno de los momentos más especiales se vivirá justo antes de la salida de cada etapa oficial. Los inscritos en la PequeVuelta realizarán una salida simbólica desde el mismo arco de partida que los corredores junior, recorriendo una distancia de entre 150 y 200 metros. Este gesto les permitirá sentirse como auténticos profesionales por un día y recibir el aplauso del público.
La organización pone un especial énfasis en la seguridad vial. Por ello, el único requisito indispensable para participar en cualquiera de las actividades es el uso obligatorio del casco, en cumplimiento de la normativa ciclista. Por lo demás, cualquier tipo de bicicleta es válida para unirse a la diversión.
Todos los niños y niñas que completen las pruebas recibirán como recuerdo un carnet de ciclista personalizado. Además, la organización ha confirmado que habrá sorteos de material del club, obsequios para todos los asistentes y muchas otras sorpresas para redondear la experiencia.
Las actividades se distribuirán entre el viernes 22 y el domingo 24 de agosto en las diferentes localidades que acogen la Vuelta. El programa completo es el siguiente:
Como novedad en esta novena edición, la organización de la Vuelta a la Ribera del Duero ha decidido instaurar un premio especial a la mejor animación. Con este reconocimiento se busca valorar la implicación de los vecinos de los municipios por los que transcurre la carrera.
Se tendrán en cuenta criterios como la originalidad, la intensidad, el uso de recursos creativos y el ambiente festivo generado. Según la organización, también se valorará el poder de convocatoria y la colaboración con las necesidades de la prueba, primando siempre la seguridad de corredores y público.
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