El Ayuntamiento teme que esta decisión pueda desembocar en la pérdida de población y anima a los afectados a alegar. La Sociedad Vecinal de Montes de Covaleda pide que se respete la ordenanza vigente.
La tradicional gestión de los aprovechamientos madereros en Covaleda, popularmente conocida como Suerte de Pinos, vuelve a la actualidad informativa a raíz de los últimos movimientos del Ayuntamiento del municipio y la Sociedad vecinal de Maderas. La consecuencia de estos es que 230 vecinos podrían quedarse fuera del próximo reparto de beneficios. Soria Noticias ha contactado con ambas partes para conocer sus posturas y precoupaciones.
José Llorente, alcalde de Covaleda, explica que la Sociedad de Vecinal presentó un recurso formal contra el último padrón de beneficiarios aprobado por el Consistorio. En dicho recurso, según ha explicado el alcalde, "se ha incluido un listado con los nombres y apellidos de 230 personas que, a juicio de la sociedad, no cumplen con los artículos 2 y 8 de la ordenanza" que regula los aprovechamientos. Esto es, que estando empadronados en el pueblo, residen fuera de forma permanente.
El Ayuntamiento, precoupado porque esta decisión pueda desembocar en un desempadronamiento masivo, decidió mover ficha y se notificó la situación a los afectados "para que puedan presentar alegaciones", apunta LLorente. Para el regidor, la ordenanza que regula los provechamos "está desfasada" y alerta de las consecuencias que esta acción podría acarrear, no solo para los señalados, sino para el conjunto del pueblo: "Si al perder los pinos, más de doscientas personas deciden desempadronarse todos saldremos perdiendo. Las subvenciones se reparten en función de la población, los servicios habrá que pagarlos entre menos personas... Son muchos matices a tener en cuenta".
En este sentido, Llorente ha defendido la importancia de cada persona empadronada, independientemente del tiempo que resida físicamente en el pueblo. "Lo que necesitamos los pueblos es población. Es igual que vivan 20 días en Covaleda o 30 o 100, pero están empadronados y tienen un vínculo al pueblo", ha reiterado. Con poco más de 1.500 vecinos, la pérdida de más de 200 sería más que una sangría.
Los afectados disponen de un plazo de 15 días para presentar sus argumentos. Si no lo hacen, se entenderá que aceptan su exclusión del reparto. El alcalde, sin embargo, ha cuestionado duramente la legitimidad de la sociedad para llevar a cabo este tipo de control. Para Llorente, la función de esta entidad es muy específica y no incluye la fiscalización de sus convecinos. "La única competencia que tiene la sociedad vecinal es, una vez que el ayuntamiento le enajena la madera, ponerle precio, venderla y repartir el dinero, es que no tienen más potestad", ha sentenciado el primer edil.
Por su parte, Mateo García, presidente de la Sociedad Vecinal de Montes de Covaleda, explica que la intención del colectivo es "cumplir y hacer cumplir la ordenanza vigente". Reconoce que este texto "puede estar desfasado en algunos sentidos", pero defiende que "los que viven en el pueblo, que son los que hacen el pueblo y mantienen sus servicios, son los que deben recibir el beneficio de sus montes". Por ello, pide diferenciar entre empadronamiento y derecho a pinos, porque "no es lo mismo y no hay que confundir".
García recuerda que "es el Ayuntamiento el que debe tomar una decisión respecto al padrón" y asegura que la Sociedad Vecinal ha actuado "escuchando las quejas de un grupo de vecinos". Sabe que el recurso presentado por la asociación que representa puede tener consecuencias sobre el número de habitantes de su pueblo, pero opta por separar "el cumplimiento de la normativa" de las decisiones personales que puedan venir después.
Únete al universo Soria Noticias Descárgate nuestra APP, entra en nuestro canal de WhatsApp o síguenos en redes.