Menos riesgo de incendios y montes más cuidados: la propuesta fiscal de ASFOSO a la Junta

La Asociación Forestal de Soria (ASFOSO) ha presentado una propuesta a la Junta de Castilla y León para crear incentivos fiscales dirigidos a los propietarios de montes. La iniciativa busca fomentar una gestión activa de las fincas forestales, una medida que, según la organización, mejoraría la conservación del patrimonio natural y reduciría significativamente el riesgo de incendios.

El objetivo principal es combatir la degradación de los espacios forestales y los peligros asociados a su abandono, como la propagación de incendios o la aparición de plagas. Desde ASFOSO se considera que premiar a los propietarios que invierten en el cuidado y aprovechamiento sostenible de sus terrenos es una herramienta eficaz para garantizar su mantenimiento a largo plazo.

Con esta acción, la asociación soriana pretende que la conservación de los montes se convierta en una tarea compartida, capaz de proteger el valioso patrimonio natural de la provincia, al tiempo que se generan oportunidades en el medio rural y se refuerza la seguridad ambiental de toda la comunidad.

La propuesta

La propuesta trasladada al gobierno autonómico consiste, concretamente, en ampliar o extender las deducciones fiscales que ya existen en la actualidad. La idea es que las inversiones en conservación de espacios protegidos o del patrimonio histórico y cultural de Castilla y León se apliquen también a las inversiones destinadas a restaurar, conservar o prevenir incendios en espacios forestales de la Comunidad.

De esta manera, los propietarios de montes que realicen mejoras en sus fincas podrían beneficiarse de deducciones autonómicas en su declaración de la renta. Se busca así incentivar económicamente a quienes apuestan por un mantenimiento activo de sus propiedades forestales.

Un beneficio que trasciende el ámbito privado

Desde la Asociación Forestal de Soria se quiere hacer hincapié en que el beneficio de esta medida no se limitaría a los dueños de los terrenos. Según detallan desde la organización, el impacto positivo trascendería el ámbito privado, ya que una gestión activa de los montes repercute directamente en una mejor conservación de los espacios naturales y en la seguridad de toda la sociedad.

Un monte bien gestionado es menos vulnerable a los incendios forestales, actúa como un sumidero de carbono más eficaz y preserva mejor la biodiversidad. Por tanto, la iniciativa no solo apoya a los propietarios, sino que contribuye a la protección del medio ambiente y a la prevención de catástrofes naturales que afectan al conjunto de la población.