Adiós a los mojones: así moderniza la Junta de Castilla y León la delimitación de fincas agrícolas

La Junta de Castilla y León impulsa la modernización del campo con un novedoso sistema para identificar y delimitar las fincas agrícolas. La localidad vallisoletana de Santibáñez de Valcorba es la primera en estrenar esta tecnología, que combina hitos físicos de alta resistencia con información digital precisa.

Esta iniciativa fue presentada el pasado 24 de octubre durante la visita del director general de Desarrollo Rural al municipio. El nuevo método se integra en el programa informático CONCENTRA, una herramienta diseñada por el Gobierno autonómico para agilizar los complejos procesos administrativos de la concentración parcelaria.

Con este avance, se busca simplificar y dar mayor seguridad jurídica a los propietarios de los terrenos. El sistema relaciona toda la información de cada finca de reemplazo, incluyendo cartografía, superficie, titularidad y situación jurídica, con los hitos que la delimitan sobre el terreno.

El método supone una evolución significativa frente a los tradicionales mojones de hormigón. Los nuevos hitos están fabricados con resina de poliéster, un material que aporta ligereza, es resistente a los rayos ultravioleta y a los cambios de temperatura, y cuenta con una elevada resistencia a los impactos. Su diseño, con un tronco piramidal de color blanco, facilita una colocación más rápida y garantiza una mayor durabilidad.

Cada hito lleva en su parte superior una arandela de aluminio con la inscripción ‘Junta de Castilla y León’ y ‘Concentración Parcelaria’, además de un número único que lo identifica. Este número está asociado a las coordenadas geográficas de la finca con una precisión centimétrica. Para facilitar el acceso a esta información cartográfica, la Junta ha proporcionado a los propietarios un código QR. Además, los datos están disponibles en distintos formatos para poder cargarlos directamente en los GPS de los tractores.

Actualmente, la Junta de Castilla y León está trabajando en un total de 64 procesos de concentración parcelaria repartidos por toda la Comunidad, que afectan a una superficie total de 340.000 hectáreas. En la provincia de Valladolid, se actúa en nueve zonas que suman 73.500 hectáreas. Estas áreas son las de Rábano II, Tierra de Campos Oeste, Tordehumos - Villabrágima - Morales de Campos, Medina de Rioseco - Villanueva de San Mancio - Tamariz de Campos-Regadío, San Román de Hornija II, Santibáñez de Valcorba, Pozal de Gallinas II, Valoria la Buena II y Castronuño II.

El objetivo de estos procesos es mejorar la competitividad de las explotaciones agrarias mediante la agrupación de parcelas y la modernización de infraestructuras. Estas actuaciones son clave para contribuir al desarrollo rural y a la sostenibilidad del sector agrario en la región.