La Junta firma dos protocolos para reforzar el sistema de Protección Civil. Los acuerdos garantizan la asistencia psicológica a víctimas y personal de emergencias, incluido el operativo INFOCAL, y mejoran la accesibilidad y comunicación con las personas sordas a través de nuevas tecnologías y formación.
El sistema de Protección Civil de Castilla y León se refuerza para ofrecer una respuesta más integral en situaciones de emergencia. La Junta ha firmado dos nuevos protocolos para garantizar la asistencia psicológica a víctimas e intervinientes y para mejorar la comunicación y atención a las personas sordas.
El consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez-Quiñones, ha suscrito este martes los acuerdos en un acto oficial. Los convenios se han firmado con el Colegio Oficial de Psicología de Castilla y León (COPCYL) y la Federación de Asociaciones de Personas Sordas de Castilla y León (FAPSCYL).
Por parte de las entidades colaboradoras, han rubricado los documentos el vicedecano del COPCYL, Vicente Martín Pérez, y la presidenta de FAPSCYL, María Rosa Galván García. Ambos protocolos buscan fortalecer la capacidad de respuesta ante catástrofes y desastres en la Comunidad.
El primer acuerdo establece un marco de actuación para que tanto las personas afectadas por una emergencia como los propios profesionales que intervienen en ella puedan recibir atención psicológica inmediata. El objetivo es ayudar a gestionar el impacto emocional derivado de estas situaciones críticas.
Una de las principales novedades es la ampliación de esta prestación al personal integrante del operativo de lucha contra incendios forestales de Castilla y León (INFOCAL). Según ha señalado el consejero, esta medida responde a la necesidad detectada por los propios psicólogos tras las sesiones con evacuados por los incendios del verano, quienes concluyeron que la atención debía continuar.
Hasta principios de octubre, la Agencia de Protección Civil y Emergencias ha solicitado esta asistencia en 69 ocasiones durante este año. Los casos más frecuentes han sido intentos autolíticos (35 %), accidentes de tráfico (24 %) y personas afectadas por incendios forestales (16 %).
El COPCYL se compromete a mantener un turno de intervención disponible las 24 horas del día, todos los días del año, con profesionales formados específicamente en emergencias. Además, se especializarán los cursos de ayuda psicológica para los primeros intervinientes, como bomberos, policías locales y voluntarios.
El segundo protocolo, firmado con FAPSCYL, se centra en garantizar que las personas con discapacidad auditiva tengan un acceso pleno y eficaz al sistema de Protección Civil. El fin es que los mensajes de autoprotección y las alertas lleguen con la misma prontitud y exactitud a toda la ciudadanía.
Para ello, se revisarán los protocolos de respuesta y se adaptará la información para las personas sordas. También se trabajará con los servicios de emergencia (bomberos, policías) para mejorar su atención durante las intervenciones y se interpretará a la Lengua de Signos Española el catálogo de consejos de autoprotección.
La Junta ya cuenta con herramientas para facilitar esta comunicación, como un sistema de chat vía SMS y la aplicación SilseCyL, que permite una videollamada entre la persona sorda, un intérprete y el operador del 1-1-2. Esta aplicación, financiada con 633.000 euros de los fondos Next Generation-EU, también conecta con otros servicios como el centro ‘Atiendo’ para víctimas de agresiones sexuales.
Además, se está trabajando en la implementación de otras dos vías de comunicación con el 1-1-2: el uso del Texto en Tiempo Real (RTT) y la videollamada como forma ordinaria de contacto. El protocolo también contempla la formación en emergencias para personas sordas y pautas de atención para el personal del 1-1-2.
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