La Junta de Castilla y León ha anunciado un paquete de ayudas de 2,25 millones de euros para 2025 destinado a la protección de las razas ganaderas autóctonas. La medida incluye 250.000 euros para las asociaciones que gestionan los libros genealógicos y dos millones de euros en subvenciones directas para los criadores.
La Junta de Castilla y León refuerza su compromiso con la ganadería tradicional mediante un paquete de ayudas que suma 2,25 millones de euros para 2025. La iniciativa se divide en dos líneas de subvención: una de 250.000 euros para las asociaciones gestoras y otra de dos millones para los criadores que trabajan con estas especies.
El objetivo de esta doble convocatoria, según informa la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, es sufragar la actividad de las entidades que preservan el patrimonio genético y, al mismo tiempo, reconocer el esfuerzo de los ganaderos que mantienen estas explotaciones. Actualmente, las asociaciones beneficiarias representan a un millar de explotaciones y cerca de 35.200 cabezas de ganado en la Comunidad.
Además del apoyo económico, la Junta pone a disposición de estas entidades sus laboratorios, centros de genética, centros de reproducción y bancos de germoplasma para conservar y proteger los recursos genéticos de estas especies, muchas de ellas amenazadas.
La primera línea de subvenciones, dotada con 250.000 euros, está dirigida a las nueve asociaciones responsables de gestionar los libros genealógicos de las razas autóctonas de Castilla y León. Esta ayuda busca financiar la actividad de estas entidades en sus programas de cría oficiales.
Las beneficiarias de estas ayudas son las siguientes organizaciones:
De forma complementaria, se ha convocado una línea de subvenciones de dos millones de euros en régimen de concurrencia competitiva, destinada directamente a los ganaderos. Esta convocatoria, que se encuentra pendiente de resolución, busca potenciar la cría de estas razas y animar a otros profesionales a seguir este camino.
Las cuantías de las ayudas varían según la especie, oscilando entre los 18 euros por ejemplar inscrito en el registro oficial para las razas aviares y los 360 euros por Unidad de Ganado Mayor (UGM). El importe máximo que podrá recibir cada explotación se ha fijado en 6.000 euros.
Castilla y León cuenta actualmente con 19 razas autóctonas reconocidas, nueve por la propia Comunidad y el resto por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. Estos animales poseen cualidades propias de adaptación al medio natural, fruto de su evolución a lo largo del tiempo en el territorio.
El apoyo a su cría y mantenimiento es fundamental para conservar la biodiversidad y el valioso patrimonio genético que representan para el sector ganadero de la región.
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