La gastronomía medieval sitúa a Almazán como epicentro culinario este noviembre

La villa adnamantina se prepara para un viaje gastronómico al Medievo con la celebración del XVII Concurso Internacional de Pinchos y Tapas Medievales. Siete cocineros de España y Portugal competirán por el título de 'Chef Medieval 2025' con creaciones que excluyen ingredientes posteriores al descubrimiento de América.

Almazán se convertirá en el epicentro de la gastronomía histórica durante el fin de semana del 14, 15 y 16 de noviembre. El certamen, organizado por la Red de Ciudades y Villas Medievales, reunirá en la localidad soriana a los chefs ganadores de los concursos locales de sus respectivas villas, que defenderán los sabores y productos de su tierra.

La competición principal, donde se decidirá el sucesor de Íñigo Tizón, campeón de la edición de 2024, tendrá lugar el sábado 15 de noviembre. Este evento no solo pone a prueba el talento culinario, sino que también rinde homenaje a la historia y la identidad de cada uno de los municipios participantes.

Siete aspirantes al título de Chef Medieval 2025

Siete cocineros, procedentes de diferentes puntos de la península ibérica, medirán su ingenio en los fogones de Almazán. Cada uno de ellos llega a esta final tras haberse proclamado vencedor en su certamen local.

Los participantes de esta decimoséptima edición son:

• Gorka Irisarri, del restaurante Danonzat (Hondarribia, Gipuzkoa).
• Cristian Solana, del restaurante El Puntido (Laguardia, Álava).
• Iban Garín, del restaurante Bienara (Estella-Lizarra, Navarra).
• Rubén Urbano, del Bar Restaurante El Fogaril (Sigüenza, Guadalajara).
• Trinidad Sánchez, del Bar La Terraza (Valencia de Alcántara, Cáceres).
• José Mário Magalhães, del restaurante A Adega (Marvão, Portugal).
• El representante local del Hotel Villa de Almazán, que competirá en casa.

El reto de cocinar sin ingredientes de América

Una de las características más singulares del certamen es la restricción en el uso de ingredientes. Los chefs tienen prohibido emplear cualquier producto que llegara a Europa tras el descubrimiento de América. Esto significa que no pueden utilizar alimentos tan comunes hoy en día como la patata, el tomate o el pimiento.

Esta norma obliga a los cocineros a exprimir su creatividad y a basar sus elaboraciones en los productos disponibles en la Edad Media. El ingenio se convierte así en la principal herramienta para crear joyas gastronómicas en miniatura, combinando técnicas de vanguardia con el respeto por la tradición.

Ruta del Pincho abierta al público

Paralelamente al concurso, Almazán celebrará una gran fiesta gastronómica abierta a todos los visitantes. Durante los tres días del evento, se podrá disfrutar de la Ruta del Pincho Medieval en los bares y restaurantes de acogida de la localidad.

Los asistentes tendrán la oportunidad de degustar las propuestas culinarias a un precio de cuatro euros, que incluirá el pincho y una bebida. Esta iniciativa permitirá saborear la esencia medieval en un ambiente festivo que llenará la villa de aromas e historia.

Un evento que fusiona gastronomía y patrimonio

El alcalde de Almazán, Jesús Cedazo, ha invitado a disfrutar de "un fin de semana inigualable, en el que la historia y la gastronomía se fusionarán". Cedazo ha agradecido a los municipios de la red su colaboración en esta "experiencia gastro-patrimonial única, donde los sabores y el patrimonio medieval se volverán a dar la mano en Almazán".

Por su parte, el presidente de la Red de Ciudades y Villas Medievales, Igor Enparan, ha subrayado que el certamen "es mucho más que un concurso culinario: es una celebración del talento, de la identidad local y del espíritu que une a nuestras ciudades y villas". Enparan ha destacado que Almazán ofrece "el escenario perfecto para seguir fortaleciendo la Red, impulsando el turismo sostenible y poniendo en valor lo que nos hace únicos: la fusión entre cultura, historia y sabor".