La presión de PACMA contra el Toro Jubilo de Medinaceli se duplicará este año

El Partido Animalista con el Medio Ambiente (PACMA) ha anunciado su intención de intensificar la presión contra el Toro Jubilo, declarando que convertirá Medinaceli en “el nuevo Tordesillas”. La formación política prevé para este año una movilización que duplicará la del año anterior, enmarcada en una estrategia que también incluye la vía judicial y la presión internacional.

La advertencia se produce en un contexto de creciente movilización social y de organizaciones que luchan por los derechos de los animales contra uno de los festejos taurinos más singulares de España. Según ha manifestado el presidente nacional de PACMA, Javier Luna, si el evento no deja de celebrarse en los próximos años, el número de personas que acudirán a protestar a Medinaceli “irá aumentando”, replicando la estrategia que, según afirman, condujo a la modificación del Toro de la Vega en Tordesillas.

Para la edición de este año, la organización espera un notable incremento de asistentes a su concentración. Hay reservados dos autobuses de Madrid y se espera la llegada de activistas desde diferentes puntos del país en vehículos particulares, con el objetivo de visibilizar su rechazo al festejo.

Presión internacional y batalla legal

Los animalistas aseguran que la presión internacional también irá en aumento. Según el comunicado emitido, diferentes organizaciones internacionales, apoyadas por “celebridades mundiales”, se han puesto en contacto con el partido para coordinar acciones y detener un festejo que califican de “medieval”. Recuerdan, además, sucesos como el ocurrido en 2022, cuando un toro falleció durante la celebración.

Paralelamente a las movilizaciones en la calle, la formación política ha confirmado que continuará la batalla judicial en los tribunales hasta conseguir su objetivo final: la abolición del Toro Jubilo.

Críticas a las medidas de seguridad

El partido animalista también se ha pronunciado sobre el dispositivo de seguridad habitualmente desplegado en la plaza de Medinaceli. Considera “innecesario el triaje de seguridad”, argumentando que “los violentos no son los animalistas, son los que torturan al toro”.

En este sentido, la formación política sostiene que las autoridades “tienen que velar por la seguridad del toro”, cambiando el foco de la protección durante el desarrollo del evento.