Soria busca en la Edad del Hierro las claves de un futuro sostenible

La Diputación Provincial de Soria, en colaboración con la asociación Orígenes, ha presentado el congreso 'La Iª Edad del Hierro en la Península Ibérica: Hallazgos recientes y enfoques transdisciplinares'. Este encuentro científico, que se celebrará los días 12 y 13 de diciembre en el Aula Magna Tirso de Molina, con su inauguración oficial el día 12 a las 18:00h, se ha concebido con la vocación de viajar "más de 2.000 años atrás para comprender los orígenes de la provincia y, al mismo tiempo, extraer valiosas lecciones para el presente y el futuro".

En la presentación, el diputado de Cultura, Enrique Rubio, ha subrayado que "en el pasado está la explicación de mucho de lo que es el presente". El congreso, que nace con la pretensión de tener un "carácter bienal", se ha estructurado sobre dos pilares fundamentales. Por un lado, "rendir homenaje a la generación de investigadores que en los años 80 y 90 protagonizaron una de sus épocas de esplendor" en la arqueología soriana. Por otro, consolidarse como un "foro científico de referencia donde mostrar los últimos hallazgos y avances metodológicos en el estudio de este periodo histórico", haciendo referencia a la Edad del Hierro.

La iniciativa busca poner en valor la riqueza arqueológica de un territorio que, aunque hoy sea uno de las regiones españolas con menos población, "demuestra que es un lugar donde las sociedades han podido desarrollar su vida durante muchos años", ha señalado Rubio. Para ello, la Diputación participa con "una aportación de 5.000 euros a la asociación Orígenes y una ayuda de 460 euros para cada uno de los ponentes, además de cubrir otros gastos de protocolo".

Para Rubio, "conocer nuestra historia es parte del ADN, es parte de la esencia de una Diputación como la de Soria", vinculando este evento al apoyo que la Administración Provincial está prestando a yacimientos como "la Villa Romana de La Dehesa en Las Cuevas de Soria, que recibió más de 4.000 visitantes el año pasado, siendo, también, un motor turístico".

Un homenaje a los pioneros y una ventana a la investigación actual

El congreso dedicará su primera jornada, el 12 de diciembre, a homenajear a aquellas personas que fueron muy importantes en el conocimiento de la Edad del Hierro en Soria. Enrique Rubio ha mencionado nombres como los de Fernando Romero, Marisa Cerdeño, Alfredo Jimeno o Francisco Burillo, a quienes ha calificado como "indispensables en todos estos trabajos".

La segunda jornada, el día 13, contará con 12 ponencias científicas centradas en proyectos de investigación que están en curso, ofreciendo una vista de absoluta actualidad centrada en el pasado. Antonio Chaín, director del Proyecto Orígenes, ha explicado que el objetivo es ofrecer una "visión amplia, partiendo de Soria para luego abrir el foco a otros territorios de la península". Se presentarán novedades sobre yacimientos sorianos como el "Cerro de San Cristóbal en Las Cuevas de Soria, donde se están estudiando los primeros procesos de sedentarización, y el Castillejo de Castilfrío de la Sierra". Chaín ha indicado que también contarán con su espacio otras investigaciones que se están realizando en otros puntos del territorio español como "Zaragoza, Ciudad Real, Navarra o Salamanca", e incluso ha añadido que habrá espacio "para el análisis de la interacción entre los fenicios y las poblaciones del interior".

Chaín ha destacado que la arqueología, como ciencia, "ha avanzado enormemente en las últimas décadas", gracias a "la introducción de elementos como paleomagnetismo, carbonos 14, ADNs y todo tipo de analítica, que permiten generar una cantidad de información muchísimo mayor del registro arqueológico de la que obteníamos hace 20 años", haciendo que esta progresión de a los investigadores un campo visual mucho más amplio y un camino para entender cómo vivían los antiguos pobladores de nuestra tierra y dónde se asentaban. Por ello, el congreso se centrará en "hallazgos recientes y enfoques transdisciplinares".

Lecciones del pasado para un futuro sostenible

Más allá del interés puramente histórico, el congreso plantea una reflexión de plena actualidad. Antonio Chaín ha lanzado una de las ideas que más potencia tendrán en el encuentro: "El estudio de estas sociedades milenarias puede ofrecer claves para un futuro más sostenible". El incestigador a argumentado, para refendar esta idea, que, "cuando analizamos este pasado, de hace casi 3 milenios, lo que vemos es que esta gente se asoció al medio sin depredarlo, sin sobreponerse, lo que generó fueron unas simbiosis correctas". De esta forma, no se trata solo de entender el pasado, sino de mirar hacia el futuro en pro de buscar una sociedad que tenga capacidad para subsistir sin arrasar el medio: "Ellos tenían diversidad de árboles a su alrededor que no talaron para hacer campos de cultivo, sino que aprovechaban el fruto que les ofrecían, como las bellotas". Según ha detallado, estas comunidades se "adaptaban a su entorno en lugar de transformarlo de forma intensiva".

Esta herencia no es solo conceptual, sino también material, ya que "el utillaje y las herramientas que se crearon durante la primera del hierro es el utillaje de nuestra cultura tradicional hasta que entró el tractor y la motosierra". Esta sorprendente continuidad, que, quizá haya quedado obsoleta tras la Revolución Industrial, demuestra la eficacia de unas fórmulas de vida que ahora, en un contexto de crisis climática, "vuelven a ser relevantes".

El congreso, por tanto, no solo mira al pasado, sino que lo utiliza como un espejo para el presente y un sendero para el futuro. Como ha concluido Chaín, "quizás estas viejas claves del pasado nos sirvan para, en un futuro, generar modelos mucho más adecuados para lo que tienen que ser nuestras sociedades. Por tanto, si cabe hoy, el pasado es más presente que nunca".