La Junta comprará aves para reponer los animales sacrificados en Castilla y León por la gripe aviar 

La crisis de la gripe aviar en Castilla y León parece haberse estabilizado en los últimos días. Carlos Fernández Carriedo, portavoz de la Junta, ha confirmado que "hace un mes" que se detectó el último foco en la comunidad. No obstante, la alarma sigue vigente y las medidas establecidas para el control de la enfermedad también. Las cifras permiten hacernos una idea de la magnitud del problema. Se han detectado siete focos que han obligado al sacrificio de 2.114.000 aves en toda Castilla y León.

En su análisis, Carriedo ha desgranado el doble impacto que esta crisis sanitaria está teniendo tanto en el sector productivo como en los consumidores. El primer golpe, y el más directo, lo han recibido las granjas y empresas avícolas. "Las consecuencias, económicas y sobre el empleo, tardarán tiempo en recuperarse", ha explicado el portavoz. La Junta es consciente de que "sin un esfuerzo económico significativo, muchas explotaciones no podrían asumir los costes derivados de la crisis y volver a la normalidad", ha añadido.

Para afrontar esta situación, el gobierno regional ha puesto en marcha un plan de choque urgente estructurado en dos fases. La primera, ya en ejecución, se ha centrado en las tareas más inmediatas y críticas. Según ha detallado Carriedo, esta etapa "tiene que ver con el sacrificio, con la limpieza, con la higiene". Inmediatamente después, se activará la segunda fase, que será "muy inmediata" y consistirá en "la compra de nuevas aves para procurar la reposición" y "permitir así que las granjas puedan reiniciar su actividad productiva lo antes posible".

Los consumidores

El segundo gran damnificado por esta crisis es el consumidor, que ha visto cómo el precio de un producto básico como son los huevos se ha disparado, contribuyendo a una inflación ya elevada. Carriedo ha reconocido el impacto, pero ha querido lanzar un mensaje de tranquilidad respecto a la disponibilidad del producto. "No hay desabastecimiento en el mercado. Afortunadamente, Castilla y León es una gran productora de huevos", ha asegurado.

El portavoz ha enmarcado el problema en un contexto más amplio, subrayando que no se trata de una crisis local, sino de un fenómeno internacional. "España produce más de lo que consume, pero hay que ver el mercado como un todo", ha manifestado. Desde esta perspectiva, la solución para estabilizar los precios pasa ineludiblemente por recuperar los niveles de producción previos a los brotes.