El sindicato se concentra por esta fecha y revela que el 20% de los empleados públicos conoce víctimas de violencia de género en su entorno. El sindicato exige al Ministerio medidas urgentes contra la brecha salarial y protocolos de acoso.
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) de Soria ha oficado este martes, 25 de noviembre, una concentración simbólica en su sede para conmemorar el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. Bajo el lema 'Todas las violencias duelen, todas deben terminar', el sindicato alerta de que el 20% de los empleados públicos conoce casos de violencia machista en su entorno laboral.
Como cada año, la organización sindical se ha sumado a las reivindicaciones del 25N mediante la lectura de un manifiesto en sus instalaciones. El acto busca visibilizar una problemática que, lejos de ser ajena a la administración pública, está presente en el día a día de los centros de trabajo. Desde el sindicato insisten en que las instituciones no pueden permanecer impasibles ante esta realidad social.
Para dimensionar el alcance del problema, CSIF ha realizado una encuesta aleatoria a mil personas que trabajan en la Administración General del Estado (AGE). Los datos arrojados son reveladores: el 20% de los encuestados afirma conocer en su entorno laboral al menos a una mujer víctima de violencia de género. Tal y como ha señalado la organización, estos resultados deben servir como "punto de reflexión" para que todas las administraciones elaboren estudios exhaustivos que actúen como referente en la lucha contra esta lacra.
La encuesta también pone de manifiesto la necesidad de mejorar las herramientas de los trabajadores públicos. El 89% de las personas consultadas considera que la administración central debe reforzar la formación del personal. El objetivo es capacitar a los empleados para detectar y actuar ante posibles situaciones de violencia machista, poniendo freno así al vacío existente actualmente en el ámbito laboral.
Otro de los focos de la denuncia de CSIF se centra en la desigualdad económica. El sindicato ha recordado que existe una brecha de género en las administraciones públicas, donde las mujeres perciben un salario un 10% menor que los hombres. Para la organización independiente, las administraciones —tanto central como autonómicas y provinciales— y las empresas privadas deben tomar "medidas urgentes, concretas y estructurales" para atajar un problema que afecta a la salud y la conciliación de miles de trabajadoras.
En este contexto, y en el marco de la negociación colectiva iniciada recientemente con el Ministerio de Función Pública, CSIF está poniendo sobre la mesa medidas específicas para garantizar la igualdad y la no discriminación. Entre las exigencias destacan la publicación y registro de los planes de igualdad, así como la corrección efectiva de la brecha de género.
Asimismo, el sindicato reclama la implantación de protocolos de prevención y actuación frente al acoso sexual o por razón de sexo. De esta forma, se busca proteger a las empleadas públicas frente a cualquier vulneración de su libertad sexual, garantizando entornos laborales seguros y equitativos.
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