Monreal da el pistoletazo a la Navidad con la primera colección de Marina García para el hombre soriano

Decenas de sorianos y sorianas se han acercado hoy a Joyería Monreal para disfrutar de su gran Fiesta de Navidad y conocer de primera mano y con los consejos de la autora las últimas obras de la joyera Marina García. Rodeado de la elegancia que caracteriza a uno de los establecimientos más emblemáticos de Soria, la jornada ha estado acompañada de champagne y te, gominolas y bombones y el sorteo de 3 joyas entre todos los amigos del universo Monreal que han acudido a la tienda.

Con más de 7.500 referencias, 18.000 unidades en stock y la posibilidad de pedir al cliente cualquier joya o reloj de las mejores marcas del mundo en tan solo 48 horas, Joyería Monreal está lista para una intensa campaña de Navidad. Una campaña que la propia Pilar Monreal prevé “estupenda” ya que, reconoce, “en estas épocas nos va muy bien gracias a nuestros maravillosos clientes”. No en vano, Joyería Monreal es el establecimiento que más Soria Bonos canjea.

La joyería del Collado se convierte en un referente para los regalos de Navidad de miles de sorianos y parada obligatoria de los Reyes Magos y Papa Noel. También para aquellos que buscan un detalle que diga Soria por los cuatro costados o, simplemente, para aquellos que gustan de ataviarse con clase y buen gusto. Un deseo, el de cuidarse y mimarse, que cada vez es más compartido por los varones, como demuestra la última colección de Marina García que ya puede disfrutarse en Monreal.

El hombre que ya está aquí

“Ya os tocaba”, reconoce Marina García que se muestra encantando por la tendencia del sector masculino a añadir cada vez más joyas a sus outfits. Un hombre “que se cuida, que se mima, que se gusta a sí mismo, que quiere también proyectar su personalidad hacia el exterior” y que no busca tanto proyectar poderío económico sino “acompasar su sentir y su personalidad con su apariencia”.

Un hombre que “ya está aquí”, también en Soria, y para el que Marina García ha creado su primera colección enfocada en los varones. Una colección que tiene menos volumen que lo que suele verle en pasarelas, estrenos y alfombras rojas en los looks de actores, músicos e influencers y que apuesta por joyas delicadas, sutiles y elegantes que se alejan de la típica joya masculina grotesca y callejera.

Crear esta colección ha supuesto un reto para la diseñadora, que buscaba un equilibrio para no caer en propuestas "demasiado clásica y convencional" ni "pasarte de muy moderna". Para ello, ha experimentado con materiales novedosos como el titanio, la plata matizada con baño de rutenio para un "toque seda muy sutil", y pequeños detalles en oro o diamantes negros. El resultado es una colección que ha sorprendido gratamente, atrayendo no solo a los jóvenes, sino también a hombres de 50 o 60 años que sienten que "les apetece actualizarme".

Del oro que nunca falla a la vuelta de las perlas

Marina García trae al establecimiento soriano también su colección de oro y brillantes. Unas piezas que “juegan en una liga aparte” y que destacan por su minimalismo. “Son sencillas, más finitas, adaptadas a las tendencias actuales”, nos cuenta. Los pendientes trepadores de oro con brillantes o los colgantes donde el diamante queda completamente suspendido y brilla con cada movimiento de la mujer que lo lleva son “casi hipnóticos”.

De la finura del oro y el diamante pasamos a la plata, donde es posible jugar con más volúmenes y la tendencia de joyas de mayor tamaño. “Vienen los aros dobles o triples, también trepadores y las asimetrías”, destaca García como las tendencias dentro de este ámbito para las mujeres. Entre las más jóvenes, está volviendo a ponerse de moda la perla, adoptada sin reparos por una generación que ya no las considera ‘de abuelas’ porque las suyas ya no las han llevado nunca.

Las gargantillas asimétricas y los chokers muy cortos y pegados al cuello son los collares más en boga ahora mismo. Por su parte en las manos y muñecas el brazalete se ha convertido en algo “clave y fundamental” para culminar cualquier look. Una tendencia que puede verse en las pasarelas tanto en chicos como en chicas, que ya no son solo para el verano y que pueden servir lo mismo para una boda que para el día a día en la oficina.